La necesidad de un “Observatorio de personas mayores”

Por Magdalena Tiesso. La legisladora del FdT remarcó la urgencia de contar con un organismo que diseñe, implemente y audite las políticas públicas destinadas a la tercera edad, para “promover y proteger” sus derechos.

Hace poco la Legislatura Porteña aprobó una reforma del “Régimen Legal de Instituciones Geriátricas” con la intención de adecuar y mejorar la realidad de las instituciones en que se aloja gran cantidad de las personas mayores de nuestra ciudad. Pero si bien la iniciativa representa un módico avance respecto de las condiciones de vida de las personas mayores, la cuestión específica es de una envergadura mucho mayor y presenta desafíos que la Ciudad, lamentablemente, hoy no está en condiciones de afrontar.

Ni la Argentina ni la Ciudad de Buenos Aires son ajenas al fenómeno mundial de aumento en la expectativa de vida de la población. El crecimiento en la cantidad de personas mayores de 60 años es un feliz hecho que trae consigo nuevos desafíos. La de la Ciudad de Buenos Aires en particular es la tasa de envejecimiento más alta del país. Quienes tienen 60 años o más alcanzarían, según las proyecciones para este año, a unas 667.210 personas. Es decir que aproximadamente uno de cada cuatro porteños forma parte del universo de las personas mayores. A su vez, los mayores a 65 años representan 16,4% del total de los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires. Estas cifras nos hablan de la magnitud del fenómeno y deben motivar el establecimiento de una agenda activa por parte del Estado para desarrollar políticas públicas que den respuesta a las problemáticas y demandas de este sector.

Esta nueva realidad nos exige avanzar en una Ciudad más inclusiva, integradora y justa, reflexionando sobre la importancia de desarrollar políticas orientadas a mejorar la calidad y la dignidad de vida de la población de personas mayores, con el objetivo de ir hacia un “envejecimiento activo” y una vejez digna. Hoy necesitamos adoptar una perspectiva más amplia para la reflexión y el estudio del diverso espectro de las vejeces. La gerontóloga Mónica Navarro menciona al “edadismo” como “un prejuicio que está basado en que las personas mayores son menos valiosas, pueden aportar menos o no tienen la capacidad de integrarse socialmente y de contribuir”.

Para potenciar nuevos enfoques que promuevan y faciliten una concepción de la vejez como una etapa activa y productiva de la vida necesitamos neutralizar esa clase de prejuicios, cambiar de enfoque y darle un marco institucional acorde a los nuevos tiempos. Es fundamental un Estado que piense, articule y ejecute las políticas adecuadas, pero también es necesario contar con una entidad que centralice el diseño, monitoreo, implementación y auditoría de políticas destinadas a promover y proteger los derechos de las personas mayores.

La creación de un “Observatorio de personas mayores” en el ámbito de la Ciudad es una propuesta que pretende avanzar en ese sentido. Su propósito sería el de estudiar y efectuar el seguimiento de las políticas que afecten a las personas mayores, pero también, llegado el caso, darle voz a ese sector de la población para elevar reclamos y demandas genuinas que el Estado no esté atendiendo. A su vez, un organismo como el propuesto tendría la obligación de reflexionar cualitativa y cuantitativamente con la ayuda de profesionales acerca del estado de la cuestión para teorizar, actualizar y desarrollar propuestas tendientes a mejorar cada vez más la calidad de vida de las personas mayores.

Un ya lejano 28 de agosto de 1948, María Eva Duarte de Perón, la abanderada de los humildes, proclamó los “Derechos de la Ancianidad”, que incluían cuestiones materiales como el derecho a la asistencia, a la vivienda y a la alimentación, pero también otras de orden ético como el derecho a la tranquilidad, al esparcimiento y a la salud espiritual. Estos ítems fueron incorporados luego a la Constitución Nacional en la reforma del año 1949. Esa Argentina que contemplaba de modo integral al ser humano y hacía realidad efectiva sus anhelos y necesidades fue precursora en la incorporación en su legislación de los derechos de las personas mayores.

Actualmente la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires establece, en su artículo 41°, que “la Ciudad garantiza a las personas mayores la igualdad de oportunidades y trato y el pleno goce de sus derechos. Vela por su protección y por su integración económica y sociocultural, y promueve la potencialidad de sus habilidades y experiencias. Para ello, desarrolla políticas sociales que atienden sus necesidades específicas y elevan su calidad de vida; las ampara frente a situaciones de desprotección y brinda adecuado apoyo al grupo familiar para su cuidado, protección, seguridad y subsistencia; promueve alternativas a la institucionalización”.

Para que todo ello se cumpla, la creación de un “Observatorio de personas mayores” sería un enorme paso legal e institucional, que pondría a nuestra Ciudad en la vanguardia mundial del mejoramiento de las condiciones de vida de las personas mayores.

La Legislatura porteña distinguió a la Orquesta Aeropuertos Argentina 2000

Fue en un acto que estuvo a cargo de la legisladora del FdT Magdalena Tiesso y contó con la presencia de Eurnekian, creador de la orquesta.

En un emotivo acto, la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires declaró de interés social y cultural a la Orquesta Aeropuertos Argentina 2000, por lo que el creador de la misma, Eduardo Eurnekian, recibió el diploma de manos de la legisladora porteña del Frente de Todos (FdT), María Magdalena Tiesso, autora del proyecto.

La orquesta fue creada en el año 2016 por Eurnekian con el objetivo de brindar un espacio de desarrollo profesional a jóvenes de bajos recursos. A través de becas de estudio pueden acceder a variadas experiencias profesionales y una formación de excelencia generando lazos de integración social y cultural. Actualmente está conformada por 45 músicos de entre 18 y 25 años. Anualmente concursan entre 1600 jóvenes del programa de “Orquesta Infanto-Juveniles de la Ciudad de Buenos Aires”.

Los asistentes al acto disfrutaron de tres arreglos sinfónicos para clásicos de tango: el primer arreglo fue “Por una Cabeza” de Gardel-Lepera, siguió con “Adiós nonino” de Astor Piazzola y culminó con “Tanguera” de Mariano Mores. La dirección de la Orquesta está a cargo del maestro Nestor Tedesco, quien fuera director de la Orquesta Estable del Teatro Colón.

En el evento estuvieron presentes Martín Eurnekian, presidente de AA2000; Daniel Ketchibachian, CEO de AA2000; y Aníbal Pittelli, director de la compañía. Además asistieron al acto los legisladores Claudio Ferreño y Javier Andrade (FdT), y el ex legislador Eduardo Epszteyn.

Vecinos de la Ciudad pidieron reurbanizar el barrio Ramón Carrillo

Presentaron junto a la diputada Magdalena Tiesso (FdT) un proyecto de ley mediante el cual buscarán dotar al barrio de servicios básicos y lograr “soluciones habitacionales definitivas”.

Buscando continuar con el proceso de reurbanización de los barrios populares, los vecinos del barrio popular Ramón Carrillo, ubicado en el sur de la Ciudad de Buenos Aires, junto a la legisladora del Frente de Todos (FdT) Magdalena Tiesso impulsaron en la Legislatura porteña un proyecto de ley para avanzar con las mejoras en el mencionado barrio.

La iniciativa prevé “subsanar” la falta de servicios básicos y lograr “soluciones habitacionales definitivas”. Asimismo plantea la intervención de los vecinos en la reurbanización mediante una “mesa de gestión participativa”, y establece una serie de etapas, como el loteo y consolidación de las manzanas, la construcción de viviendas nuevas, la apertura de calles y pasajes, el tendido de infraestructura de servicios básicos (agua potable, energía eléctrica, desagües cloacales, desagües pluviales, red de alumbrado público y gas natural), mejoramiento de viviendas existentes y conexión domiciliaria a los servicios.

En los fundamentos del proyecto, los vecinos explicaron que el barrio fue originalmente un complejo habitacional construido en “solo nueve meses” para recibir, en diciembre de 1990, a las 645 familias que vivían en los edificios abandonados del Albergue Warnes, que estaba en La Paternal y fue demolido en marzo de 1991.

Al mismo tiempo que señalaron que entre los problemas actuales del barrio están relacionados con sus orígenes, ya que fue construido rápidamente, sin planificación y sobre tierras muy contaminadas. “Este proyecto viene a saldar una deuda pendiente con el barrio desde hace más de 30 años, en los que, cabe mencionar, nuestra lucha vecinal nunca cesó”, aseguraron.

Y recordaron que a raíz de esa lucha, en 2004 se sancionó la ley 1.333 que declaró la emergencia de infraestructura en el barrio y ordenó al Gobierno de la ciudad de Buenos Aires realizar obras, “pero sin incluir las conexiones intradomiciliarias”.

También mencionaron que hay un fallo judicial que ordena al Gobierno porteño el “inmediato cumplimiento de dicha ley”.

El proyecto está firmado por 22 vecinos y vecinas, entre ellas Olga Amador, quien también inició la causa judicial para que el Ejecutivo porteño cumpla con la Ley 1.333.

Cabe recordar que el barrio Ramón Carrillo está ubicado en Villa Soldati, entre la calle Mariano Acosta, la avenida Castañares y la autopista Cámpora, sobre tierras que formaron parte de “La Quema”, un basural a cielo abierto que funcionó hasta 1978.