Los representantes de industrias y pymes no ocultaron su malestar por la ausencia del funcionario Pablo Lavigne, quien no asistió al encuentro. Fue unánime el reclamo por legislación que beneficie al sector.
La Comisión de Comercio de la Cámara de Diputados se reunió este martes en un encuentro informativo que tuvo como expositores a referentes de diferentes sectores industriales y pymes. Hubo reproches por la ausencia del secretario de Comercio de la Nación, Pablo Lavigne, quien prometió ir a principios de agosto.
En el inicio de la reunión, presidida por el entrerriano de Unión por la Patria Tomás Ledesma, se culminó el trámite de designación de autoridades, y estableció en la Vicepresidencia primera, al fueguino Santiago Pauli, quien fue propuesto por el oficialismo.
Luego, expusieron ocho representantes de los sectores pyme, industrial, comercio y servicios, refrigeración, electrodomésticos, lácteo, alimentos y mutuales, donde todos coincidieron que hubo una fuerte caída en el último semestre.
Antes de las exposiciones, el titular de la comisión expresó: “A la Argentina le hace falta mucho diálogo y estamos abogando a una forma de trabajar determinada por la iniciativa de los legisladores”. Del mismo modo, planteó que “este trabajo debe tener una agenda profundamente marcada”, y anunció que “es una primera instancia que va a proseguir las siguientes semanas”.
Respecto a la ausencia del secretario de Comercio, Pablo Lavigne, Ledesma explicó que “nos transmitió que no podía hacerse presente, pero mostró buena disposición para venir en los primeros días de agosto”.
El primer expositor invitado fue Daniel Rosato, referente de Industriales Pymes Argentinos –IPA-, quien advirtió que se prevén, a partir de la vigencia del RIGI –al que llamó como “un problema” para el sector-, “300.000 puestos menos de trabajo”.
En esa línea, acusó que “solo beneficiará a las grandes empresas y no a las medianas y pequeñas”. “Pedimos legislación para las pymes y si no hacemos algo al respecto, habrá una gran crisis social a fin de año”, alertó Rosato.
“Sabemos muy bien, nosotros que damos servicios a las grandes empresas, que ya están pidiendo presupuesto al exterior y muchos de China porque son más baratos”, reveló el referente industrial quien, además, se mostró autocritico y señaló que “tenemos 550.000 pymes manufactureras y estamos igual que hace 20 años atrás”.
Con relación a la situación presente del sector, afirmó que “la industria pyme está atravesando una situación grave y una crisis sin precedentes con caídas del 60% del mercado”. En ese punto, aseveró que “este problema no es por culpa de las pymes o los industriales, es la falta de políticas industriales”.
Cuestionó fuertemente que “a las pymes no nos tienen en cuenta en este desarrollo a futuro”, y explicó: “Nos piden competitividad, pero no somos competitivos porque pagamos insumos dos o tres veces más caro que el exterior y la energía la pagamos el triple en Argentina. No están dadas las condiciones para competir”.
También, sostuvo que “tenemos un costo financiero porque debemos ir al BCRA a pedir dólares, y eso es desde un 11 hasta 17 por ciento de costo adicional”. Al igual que varios expositores criticó y responsabilizó a la apertura de importaciones como factor que perjudica a su industria.
Por otro lado, criticó la calidad de los productos importados: “Hay mercadería que está entrando en mal estado al país, pero no tuvimos respuesta del Gobierno”, en alusión a la ausencia de Lavigne.
Por último, relató una situación particular: “Había tres empresas que fabricaban medidores de gas, hoy solo queda y estos medidores están fabricados bajo estándares de calidad inyectados con aluminio”. “Los que vienen de China son de chapa de hierro, se corroen, y en la costa perdían gas lo que pasó a ser un riesgo de accidente grave para la población”, enfatizó.
En su intervención, Martin Falchi, representante de la Cámara Argentina de la Industria de la Refrigeración y el Aire Acondicionado – CAIRAA- manifestó brevemente: “Nosotros fabricamos heladores, freezer y cámaras frigoríficas y estamos afectados por el mismo problema porque teníamos un arancel de 35% al producto terminado y ahora bajó a 20%”.
También, agregó: “En caso de hacerse, se debe hacer paulatinamente”. Se opuso a la derogación del impuesto al cheque y pidió establecer un costo fijo de seguridad e higiene”. “Si quieren que compitamos con el exterior que nos ayuden, no que maten a la industria”, indicó.
El presidente de la Cámara Argentina de la Industria de Chacinados y Afines, Gustavo Lazzari, expresó que “la Argentina tiene un crisol y hacemos todos los fiambres del mundo, pero nos encontramos con un costo argentino impositivo, regulatorio, laboral y logístico”.
En esa línea, añadió que “tenemos muchos impuestos que son altos, confusos, mal cobrados y no pasan un artículo de la Constitución”. También, cargó contra el LINTI -Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional- y amplió que “es un desmadre de recaudación entre Nación, las provincias y los municipios porque no somos el campo de batalla de la política, pero sufrimos los costos”.
A su vez, criticó que “somos el 6° exportador latinoamericano de China y por cada dólar que la Argentina le exporta a China, Brasil exporta 18”. De forma optimista, consideró que “300.000 millones de dólares deberíamos estar exportando”.
“No podemos conformarnos con vender un tercio de los vinos que exporta Chile. trabajemos sobre los costos y no tengamos miedo a la baja de impuestos”, cargó, y cerró: “Hagamos la Ley Bases 2, 3 o 4 pensando en las pymes, pero no queremos ningún regalo, queremos que nos saquen los pies de encima”.
Uno de los expositores más severos fue Leo Bilanski, presidente de la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino, quien inició su intervención al dejar expresa una queja sobre el presidente de la Cámara de Diputados porque “a pesar de las advertencias que hicimos, se votó dos veces la Ley Bases y no rechazó el DNU 70/2023 que destruyó las pymes argentinas”.
De igual manera, siguió: “De las 500 empresas más grandes se legisla para favorecer al capital de otro país ¿Cuánto más beneficio le tenemos que dar para que se siga comiendo nuestro capital?”. “Parece que no somos actores relevantes en la prioridad del Congreso”, destacó.
“Necesitamos que las leyes representen a los hombres y mujeres que damos trabajo en la Argentina porque también no sabemos a quién beneficia en el futuro la Ley Bases, mientras todos los que estamos acá debemos pagar sueldos el día 30”, aseveró Bilanski.
Con relación a la situación actual de la productividad en Argentina, detalló: “La situación no es cómoda para el empresario pyme porque las ventas se están cayendo en todos los sectores como en construcción, industria, comercio y servicios”.
Aseveró, además, que “desde hace dos trimestres hay más despidos que contrataciones”, y amplió: “el 36% de las industrias despidió a trabajadores y solo el 39% opera con normalidad”.
Finalmente, sostuvo que “la situación es agobiante”, y cargó contra el Gobierno Nacional: “Van seis meses de gestión y no hay dólares, no se bajó un solo impuesto y ojalá hubiese salido un régimen para pymes antes que el RIGI”.
De la Unión de Emprendedores Argentinos, Marcelo Festa remarcó su rechazo al DNU 70/2023 y señaló que los costos en comparación al extranjero para una pyme láctea son “de 6,30 de costo cuando en Italia se vende a 4,60”.
Además, propició cambios a los costos laborales: “En mi rubro un trabajador con la más baja categoría gana un millón 100 mil pesos, pero a mí me cuesta más de dos millones”. “Estamos cansados de pagar kioscos y aranceles”, sumó.
Dante Choi, empresario coreano, aseveró: “En el primer cuatrimestre se han cerrado más de 300.000 cuentas sueldo y no vemos rebrote ni mejora de la situación para el segundo semestre”.
Por otra parte, señaló que “hemos visto una apertura indiscriminada de importaciones sin control”, y cargó que “no hay control eficiente en los orígenes de los valores y nuestro sector industrial estará cerrando actividades para fin de año”.
El último en exponer fue Rodrigo Genoni, presidente de Federación de Mutualidades de La Pampa. Respecto a su provincia detalló que “en el primer cuatrimestre bajó la actividad de los comercios un 40%”, y cuestionó que “no hay costos en la Argentina porque nadie sabe lo que está pagando y si lo está pagando bien”.
En rigor, mencionó que “el 82% de la empleabilidad en la Pampa la generan las pymes”, pero advirtió que “el 28% redujo la cantidad de empleados, el 43 no puede pagar los costos a proveedores, el 35 tiene deudas financieras, 15 no pudo pagar salarios en tiempo y forma y solo el 57% pudo mantener la flota de trabajadores”.
En el final, afirmó que “la caída del consumo es una rueda que nos hace decrecer y si no se cuida la industria nacional tenemos un problema”. “Es mucha la incertidumbre que tenemos ahora porque si hay incertidumbre, no hay inversión, y si no hay inversión, cae el empleo”, concluyó.