Una medida del SENASA generó enojo en los gobiernos de Neuquén y Río Negro. El Gobierno nacional revirtió la medida y aseguró el apoyo de los gobernadores en el blindaje del DNU del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
Esta semana, en la previa del tratamiento del DNU que faculta al Ejecutivo para tomar deuda con el FMI, quedó expuesto como nunca antes el modus operandi del gobierno, consistente en amenazar a los gobernadores y luego ceder.
Está vez, el Ejecutivo Nacional protagonizó un nuevo papelón, al modificar una medida que tiene más de veinte años y desdecirse en menos de 48 horas.
Primero, de manera unilateral y sin previo aviso, el Senasa levantó la barrera fitosanitaria que impedía el acceso a la Patagonia de carne con hueso (donde se aloja el virus de la aftosa) proveniente del norte del río Colorado, a través de la resolución 180/2025.
Se quejaron los aliados Rolando Figueroa (Neuquén) y Alberto Weretilneck (Río Negro) y celebró el opositor Sergio Ziliotto (La Pampa).
Luego, ante la reacción de los gobernadores afectados, reculó y suspendió la medida por 90 días y llamó a los gobernadores a una mesa de diálogo… a excepción de Ziliotto.
En consecuencia, tras frenéticas gestiones, los diputados que responden a esos gobernadores, Osvaldo Llancafilo y Agustín Domingo respectivamente, votaron a favor del DNU
Mientras el sur del Río Colorado es territorio natural libre de aftosa, las provincias más meridionales están obligadas a vacunar para evitar la enfermedad, por lo que para ellos la medida comporta un riesgo claro.
A la inversa, el levantamiento de la protección es un reclamo histórico de la provincia de La Pampa, ubicada al norte de esa frontera natural, que tiene una pujante actividad bovina y no puede acceder a esos mercados. La llegada de carne pampeana hubiera significado también un beneficio para el bolsillo de los consumidores.
El último paso de esta comedia (por ahora) llegó con la resolución 186/2025 que suspende a la 180 y convoca a los gobernadores patagónicos a una mesa de diálogo… A excepción de Sergio Ziliotto, a pesar de que, como se encargaron de recordar funcionarios y legisladores, La Pampa integra formalmente la región patagónica, según lo establecido por la ley 23272 que data de 1985.
Weretilneck y Figueroa comparten una política de discreto apoyo al gobierno nacional. Ambos firmaron el Pacto de Mayo, que finalmente ocurrió en junio y suelen poner a sus legisladores al servicio del interés del ejecutivo.
Weretilneck, por su parte, participó junto con la cúpula de YPF de la maniobra para evitar que Petronas construyera una planta licuefactora en Bahía Blanca. Figueroa es la autoridad sobre Vaca Muerta, zona en la que se viene dando un proceso de desinversión de los jugadores internacionales del sector hidrocarburífero, cuyas posiciones son adquiridas por grupos nacionales, de buena relación con el poder político.
Ziliotto, en cambio, integra el grupo de los gobernadores peronistas opositores puros, junto con Axel Kicillof, Gildo Insfrán y Ricardo Quintela. Sostuvo un importante conflicto con las autoridades del Banco Nación, luego de que amenazaran con cerrar sucursales, tras una reforma impositiva que el gobernador impulsó para compensar los fondos que nación le retiene indebidamente.
También la Corte Suprema de esa provincia se pronunció públicamente contra el ingreso de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla por decreto a la corte nacional, que debe pronunciarse sobre sendas denuncias que Ziliotto, como cabeza del ejecutivo provincial, presentó en ese tribunal en reclamo de las transferencias por coparticipación adeudadas.
La consecuencia de esto, es un creciente apoyo en torno a la gestión de Ziliotto. La semana pasada, los intendentes de todas las fuerzas firmaron un documento reconociendo su lucha por los derechos de los pampeanos.
Esta semana, quien lo respaldó en el reclamo fue su exjefe político y principal antagonista interno, Carlos Verna. “presidente, no sea cagón y mantenga la medida”, tuiteó el ex gobernador, sin eufemismos.
Casi en simultáneo, Ziliotto realizó una presentación para captar inversiones y aumentar exportaciones, ante un grupo de embajadores de la Unión Europea. Las exportaciones de carmen pampeana a ese destino crecieron 53 por ciento el año pasado y representan más del 99 por ciento del total de exportaciones provinciales a Europa. ¿La carne pampeana cumple estándares europeos pero no neuquinos ni rionegrinos?
Tras más de quince horas de audiencia, las prepagas lograron su propio “ahora 12”. Esto es, la posibilidad de devolver lo cobrado de más en doce cómodas cuotas, y de volver a aumentar a partir de octubre próximo.
Lejos de dar por cerrado el tema, el acuerdo aumentó el enojo de las asociaciones de consumidores y de los abogados querellantes. Estos ahora evalúan llevar sus investigaciones, por cartelización entre OSDE y Swiss Medical y por los manejos de fondos de OSDE con sus proveedores, en teoría de empresas cautivas, propiedad de sus directivos, a las comisiones de salud y defensa del consumidor de las cámaras de diputados de nación y provincia.
A partir del DNU 70/23, las empresas pudieron fijar sus porcentajes de aumento y montos de cuota y, además, decidir cuánto de esos aumentos trasladaban a sus prestadores: en pocos meses, las cuotas se dispararon y los honorarios médicos y salarios del sector quedaron casi fijos. Este combo expuso a las empresas, acostumbradas al perfil bajo, a excepción de Swiss Medical y su titular, Claudio Bellocopit, a la furia de sus usuarios y, a continuación, a la pregunta del millón: ¿qué hacen con la plata?
Esta misma pregunta se hizo la jueza a cargo del juzgado federal Nro. 2 de Concepción del Uruguay, María Isabel Caccioppoli, que instruyó a la fiscal interviniente para que inicie una demanda penal por desobediencia a los directivos de OSDE, por no entregar los estados contables de la empresa.
El presidente de OSDE, el empresario dueño de varias concesionarias de autos, Martín Pochat, enfrenta ahora tres denuncias penales por desobediencia: la primera en Mendoza, la mencionada en Concepción del Uruguay y la tercera en CABA, por parte de un amparista jubilado, patrocinado por la Dra. Valeria Carreras, que interviene en la causa ARA San Juan, entre otras de alta visibilidad.
“La negativa de OSDE a mostrar sus libros coincide con denuncias sobre manejos incompatibles, denunciados recientemente, con empresas proveedoras en manos de familiares de directivos, que van de muebles de oficina, que cambian cada dos años, a consultoras informáticas y otras que estamos investigando”, señaló Carreras en declaraciones periodísticas.
Carreras sostuvo que “tanto en San Martín como en Concepción del Uruguay, las respectivas cámaras fueron muy permeables a los deseos de las empresas. Nos queda la demanda penal, que vamos a ir a ratificar por estas horas, y la investigación por cartelización, que avanza muy bien. Después veremos si la presentamos en sede judicial o a través del poder legislativo”.
PREPAGAS CURAR O CURRAR?
A 6 meses del DNU70/23
150% de aumento en 4 meses
El gobierno dictó por 6 meses, una medida para “frenar aumentos” = valor diciembre más IPCLas Prepagas no acatan cautelares, calculan con IVA, duplican aumentos, sin devolver $, sin explicar facturas pic.twitter.com/sDfMFZzAGc
— Dra.Valeria Carreras (@dravaleria) May 27, 2024
A fines de 2020, Pochat, que ya integraba la comisión directiva de OSDE y tenía a varias empresas propias como proveedoras del gigante de salud, compró Car One, lo que significó un salto cuantitativo en el volumen de sus operaciones en el negocio automotor. En los primeros meses del año siguiente, la mitad de la comisión pidió explicaciones sobre el origen de los fondos. Obtuvo la expulsión por toda respuesta.
Fuego cruzado
OSDE enfrenta, además, la furia de su aliado y socio hasta ayer, Claudio Belocopitt. Fuentes del sector confirman que Belocopitt quedó muy enojado con el resto de la industria, y especialmente con OSDE, porque esperaba que salieran en su defensa cuando fue atacado por los trolls presidenciales y sólo obtuvo silencio de su parte.
Como consecuencia de esa campaña en su contra, Belocopitt renunció a la presidencia de la Unión Argentina de Salud y desde entonces cultiva el perfil bajo. La presidencia quedó provisoriamente en manos de representantes de empresas muy menores, ante la negativa de OSDE de reemplazar a Belocopitt.
No se sabe con certeza qué forma adoptará la vendetta, pero hay un dato real. “El actual Superintendente de Servicios de Salud, Gabriel Oriolo, se encuentra hoy mucho más cerca de Belocopitt que de OSDE, empresa de la que se fue muy mal, justamente por diferencias en la política de contrataciones”, explica otro exdirectivo y gran conocedor del sector. Y agrega que “nadie conoce los manejos de OSDE mejor que Claudio, que es su socio hace treinta años y su jefe hace cinco o seis”.
La convocatoria al Pacto de Mayo fracasó por problemas de forma y de fondo.
Javier Milei no tuvo mandatarios con quienes compartir el tradicional locro patrio. Pasóá su primer 25 de mayo como presidente como pasó tantas navidades y cumpleaños a lo largo de su tortuosa vida. Solo. O con sus perros y su hermana, que es más o menos lo mismo.
Finalmente, no hubo Pacto de Mayo. El Senado de la Nación, con todas sus contradicciones a cuestas, demoró el dictamen de la ley de bases, que el propio presidente había planteado como condición necesaria, lo suficiente como para recordarle que existen otros poderes, además del suyo.
La puesta en escena en el Luna Park disimula apenas su aislamiento y su incapacidad para traducir su ansia ajustadora en instrumentos administrativos y legales. Justamente, lo que el FMI espera de él. Tampoco cambiaría nada que un par de millares de cordobeses se acerquen a vivarlo y festejarle su ya conocido repertorio. La soledad de Milei es política y por eso acaso más peligrosa que la existencial.
Los gobernadores que “la vieron”
“El diálogo debe ser con respeto”. “Nunca será posible un acuerdo si antes no se respeta la Constitución Nacional”. “No se construyen consensos pretendiendo poner de rodillas al otro, agrediéndolo y quitándole lo que le perteneces y debe defender”. Estas son algunas frases del extenso tuit que publicó el gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, el 2 de marzo al mediodía, cuando la convocatoria, celebrada por los medios adulones como un gran acierto, no tenía ni 24 horas.
No fue un tuit aislado. Esta última semana explicó porqué él y sus legisladores se oponen tanto a la vuelta de ganancias como a la reducción de bienes personales. Los radicales, en muchos casos intendentes, es decir dirigentes con responsabilidad territorial, están más cerca de esa posición que del seguidismo que practica el desorientado Pro.
El otro que “la vio” fue Axel Kicillof. “Si es para la foto, para el marketing, empiecen sin nosotros”, chicaneó el bonaerense, que además inició una política de relacionamiento mano a mano con sus pares, tendiente a superar prejuicios y prevenciones históricas, de las demás provincias hacia Buenos Aires, y de las otras fuerzas hacia el kirchnerismo. Lo refrendó el fin de semana, en el acto de Florencio Varela, con un discurso nacional, con valores opuestos al egoísmo y sálvese quién pueda dominantes.
Ambos gobernadores realizaron además respectivas presentaciones ante la corte suprema, en reclamo del FONID, el FOFOFI y las transferencias de ANSES que complementan haberes jubilatorios.
Los que no tanto
La contracara de esta actitud decidida está en los costos crecientes que pagan los dadores de gobernabilidad u oficialistas seriales. Porque el modelo es insostenible, como lo demuestra la creciente reacción popular en Misiones, que es un llamado de atención para el jefe político de ese distrito, Carlos Rovira, y porque Milei paga mal o, mejor dicho, deja pagando a los que lo cortejan, con Llaryora a la cabeza.
Los demás gobernadores patagónicos, más allá de su valentía estival, siguen siendo ambiguos. Confían en las regalías petroleras, a pesar del daño que generarían en la región medidas como el impuesto a las ganancias, el tarifazo energético y una reestructuración o privatización de Aerolíneas Argentinas.
Mientras Nacho Torres, de Chubut, empieza a esbozar cierta independencia de criterio respecto del ex presidente Mauricio Macri, Rolando Figueroa, gobernador neuquino por la segunda marca del MPN, y su émulo Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Río Negro, siguen tratando de evitar la línea planteada por Kicillof y Ziliotto.
Frente al abandono de las rutas nacionales por parte de la nación, presentaron en sus respectivas legislaturas proyectos que habilitan la concesión privada de rutas y el cobro de peajes. Ni una queja ni un reclamo judicial contra el presidente cantante. En Neuquén, sólo Unión por la Patria y la izquierda se pronunciaron contra esta secuela de los años noventa. UP además, propuso un proyecto alternativo: que pague la industria petrolera, con un canon directo, por ser la responsable del deterioro de los caminos.
A la vez, el reclamo de esas dos provincias a la administración central de constituir una empresa mixta para gestionar las hidroeléctricas, cuyas concesiones vencieron en 2023, se desinfla lentamente. Surge entonces la pregunta por la capacidad digestiva de esos mandatarios: cuántos sapos bañados en petróleo pueden tragarse.
El fueguino Gustavo Melella la tiene más complicada. Firme en la cuestión Malvinas y en todo lo tocante a la soberanía es, muy a su pesar, rehén del régimen de promoción industrial, sin el cual la isla se despoblaría en semanas.
En conclusión, llegamos a mayo sin pacto y el presidente dice que si no salen las reformas ahora saldrán después de lo que imagina será una victoria aplastante en las legislativas de 2025, sin reparar que eso implica entregar medio mandato, mientras el deterioro de la calidad de vida, como consecuencia de su modelo, se va imponiendo de modo inexorable.
Hay gobernadores que toman riesgos, otros que esperan y otros que todavía cortejan al presidente. Parece oportuno recordar aquella frase de Néstor Kirchner, “no pasarán a la historia los que especulen sino los que más se la jueguen”.