El FdT contra JxC: “Si nos ganan los que odian estamos muertos como sociedad”

Los legisladores porteños de este espacio criticaron duramente las expresiones de la principal oposición tras el crimen de Fabián Gutiérrez y cuestionaron la actitud que vienen exponiendo en plena pandemia.

El bloque de diputados porteños del Frente de Todos se sumó a la ola de repudios que desde el oficialismo se lanzaron contra Juntos por el Cambio, por el comunicado difundido el sábado pasado tras el crimen del ex secretario de Cristina Kirchner, Fabián Gutiérrez, al que calificaron de “extrema gravedad institucional”. En ese sentido, el bloque que conduce Claudio Ferreño advirtió que “si nos ganan los que odian estamos muertos como sociedad”.

En ese sentido, la bancada opositora recordó que “hace poco más de seis meses que Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner asumieron los cargos de presidente y vicepresidenta de la Nación argentina, apoyados por más del 48% de la población habilitada para votar”, y precisaron que “en diciembre de 2019 la mayor preocupación del Gobierno era cómo resolver la deuda a cien años que había contraído el gobierno anterior y que al mismo tiempo esto no implicara el esfuerzo y el sacrificio de la mayoría del pueblo argentino, el cual no fue beneficiario de la toma de deuda en ninguna medida”.

“En ese mismo momento, un virus tan letal como desconocido comenzaba a propagarse por el mundo; el Gobierno se vio obligado a administrar una pandemia con los recursos humanos, sanitarios y económicos disponibles”, señalaron y precisaron que “en esta crisis sanitaria que se ha cobrado más de medio millón de vidas en todo el planeta, aparece un sector de la oposición que ocupó lugares de poder durante el gobierno anterior, que hoy no tiene responsabilidades en la función pública y que pasa sus días de aislamiento realizando maniobras para no caer en el olvido de los medios de comunicación”.

Sobre esa misma línea, los diputados fueron sumamente críticos ante la postura que JxC adoptó en esta pandemia. “Es un sector que desborda de reuniones virtuales y entrevistas televisivas, pero que no ha demostrado ni un gesto de sensibilidad frente a los que más sufren los embates de la pandemia; que no ha manifestado ninguna actitud propositiva ni solidaria ni de asistencia tanto a la comunidad científica, médicos o fuerzas de seguridad, ni siquiera el acercar un plato de comida a quienes lo necesitan”.

Al mismo tiempo que insistieron en que “es un sector que decide quedarse en su casa y militar la anti-cuarentena provocando que otros salgan a la calle y se contagien; que desde la comodidad de su hogar de manera totalmente irresponsable e ignorante dice que ‘no hay que encerrar a la gente, sino que hay que encerrar al virus’” y aseveraron que esa oposición cuestiona las decisiones del Ejecutivo porque “sólo busca profundizar la grieta porque no importa cuál sea la decisión política que tome el Gobierno, siempre estará en contra ya que decidió hacer política desde el odio”.

“Son los mismos que apenas encontrado el cuerpo de Fabián Gutiérrez, ex secretario de Cristina Fernández, emitieron un comunicado calificando al hecho de ‘extrema gravedad institucional’, pidieron que ‘la investigación pase a la órbita de la justicia federal’ e insinuaron ‘manipulaciones en la escena del crimen’, al mismo tiempo que eran detenidos los sospechosos del crimen”, subrayaron y alertaron sobre que “son  los mismos que avalaron y no consideraron de ‘extrema gravedad institucional’ que la AFI escuchara ilegalmente a periodistas y políticos, hasta de su propio partido”.

A su vez, afirmaron que “son los mismos que cuando les conviene son peronistas, radicales o parte de la nueva política y cuando no, son antiperonistas, antiradicales, antipolíticos o emprendedores; básicamente oportunistas”; aunque aclararon que “no son todos, pero su voz es amplificada por los medios de comunicación”.

“No permitamos que el odio dirija nuestros actos, degrade las instituciones y cerque nuestro camino de unidad hacia un país más solidario. Lamentamos el fallecimiento de Fabián Gutiérrez, condenamos el crimen y nos solidarizamos con su familia y sus seres queridos”, sentencia la dura misiva.

Una dirigencia mediocre pone en jaque la unidad nacional

Por Gustavo Traverso. El senador bonaerense del Frente de Todos se refiere al “absurdo e inconsulto comunicado” que realizó Junto por el Cambio ante los hechos que son de conocimiento publico que se relación con el ex secretario presidencial Fabián Gutiérrez.

Es innegable que la Argentina vive días decisivos y no hay dudas en torno a la aceptación de la simultaneidad de fragilidades que afrontamos como Nación. A la durísima realidad, heredada de la peor gestión del periodo democrático, se le agrega la inusitada crisis sanitaria que afecta al planeta.  Cuesta encontrar también, a quien no tenga la certeza de la derivación en una parálisis económica difícil de ubicar en la historia contemporánea.

La posibilidad de afrontar estas crisis con el espíritu de la oportunidad, es una idea recurrente entre los intelectuales y pensadores que, independientemente de su ubicación en el arco político o ideológico, es auspiciosa.

La calidad de los dirigentes políticos se mide en momentos fundacionales, cuando lo que se impone son las búsquedas de las esencias identitarias nacionales, cuando casi desde la inercia estructural de la historia el sentido común apela al concepto de Unidad Nacional, cuando la intensidad de las minorías y las parcialidades políticas tienen sentido colectivo, plural y patriótico.

Demasiados años de frustraciones han puesto en jaque a nuestro sistema político y es hora que lo asumamos; por las hendijas de nuestras diferencias, se coló una versión de nuestra historia que está demostrando ser la responsable de muchas de nuestras tragedias.

En este contexto, el absurdo e inconsulto comunicado de un sector de la oposición, impacta en la política y enciende todas las alarmas.

Es preciso desplazar a las miradas sectarias, mezquinas y oportunistas. Está en nuestras manos aislar a quienes incentivan el odio, las divisiones y recuperar la convivencia entre los partidos y corrientes de nuestra joven democracia.

No hacerlo constituye un verdadero CRIMEN DE GRAVEDAD INSTITUCIONAL.