El legislador nacional Juan Carlos Lucio Godoy manifestó que “este fin de semana más que Semana Santa es mala Semana Santa para los argentinos y más en particular para los entrerrianos y santafesinos, por el desastre de las inundaciones”. Además se frustró el acto que conmemoraba “los 25 años por el fallido intento bélico de recuperación de las Islas Malvinas en Ushuaia por la intempestiva ausencia del Presidente, a pesar de que horas antes, la mismísima Nilda Garré, ministra de Defensa, había asegurado su presencia.

El argumento del oficialismo es que, supuestamente, trataba de evitar silbidos y/o abucheos tanto de los docentes de la región como de ex combatientes por la falta de respuestas a reclamos muy fuertes tanto en lo económico como en lo emocional.

Al respecto, Godoy agregó que en simultaneo “los docentes de Neuquen y Salta son reprimidos por sus legítimos reclamos, que por supuesto son realizados de manera pacífica porque de otra manera no se manifiestan los educadores argentinos. El colmo de estas actitudes gubernamentales sucedió en Neuquen en donde, hasta el momento, agoniza un docente por el accionar policial y gubernamental”. También se refirió a la represión sufrida por asambleístas de Gualeguaychú en Buenos Aires, al señalar que “recién comenzando el fin de semana largo, los entrerrianos vemos con tristeza, en directo y por televisión que los Ambientalistas de Gualeguaychú también son reprimidos y presos, en este caso por fuerzas de seguridad de la Nación demostrando que no hay límite en la Argentina de estos días para la represión”.

“Es decir, las provincias o la Nación, están retomando el uso de las balas de goma, del bastón y del garrote para parar los sólidos reclamos populares. Pareciera que en la semana de la paz, de la reflexión, de la constricción, en plena democracia reaparece eso que cada tanto recrudece en el alma de muchos argentinos y que es hacer callar al otro con la fuerza y no con la razón.

Y todo esto en un marco catastrófico para Santa Fe y Entre Ríos en donde miles de comprovincianos han perdido patrimonios que forjaron en su historia de trabajo y que seguramente no recuperarán en el futuro de sus vidas que les queda: campos, animales, sembrados, viviendas, maquinarias, muebles, escuelas y todo lo que está sobre la tierra de estas latitudes se está perdiendo o deteriorando por una de las catástrofes naturales más grandes de la historia de nuestra región. Más que una Semana Santa parece una Semana Perdida para la democracia, para la libertad, y para el patrimonio de los entrerrianos y los argentinos en general”, concluyó el diputado por la Concertación.