El electo jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri, proclamó alborozado su victoria y afirmó que “el cambio ganó en la ciudad de Buenos Aires; un cambio lleno de contenido, con otros valores, otra politica porque no queremos más resentimientos del pasado sino que haya respeto por las diferencias”. Y agregó: “No somos enimigos, ni siquiera adversario, sino constructores de un futuro mejor para todos con la cultura del esfuerzo, del mérito, del trabajo”.

Con respecto a la rotunda victoria, Macri dijo que “para el PRO, ganar va a ser que cada porteño, cada argentino este de pie”.

Un Mauricio Macri emocionado comenzó su discurso con un “simplemente gracias”.

“Gracias a todos los que votaron porque así consolidamos nuestra democracia. Gracias a los que apostaron a la esperanza y no al miedo”.

En un momento emotivo, el flamante jefe de Gobierno convocó a Maria, de 97 años, a quien definió como una “puntera maravillosa”, lo que se contradice con los ideales PRO. Seguramente un desliz de un ganador.

A nivel nacional Macri expresó su deseo de que el presidente Néstor Kirchner y manifestó que “el pais merece que hagamos un sacrifico para construir un futuro mejor y que así nadie puede detener el cambio que merece la Argentina entera”.

El triunfador de las elecciones hizo eje en demostrar los dichos con trabajo. “No es lo mismo quien trabaja quien esta siempre de licencia”, manifestó Macri con un ejemplo sobre los docentes. Además, definió: “el siglo xx fue el de los derechos humanos, el XXI tiene que ser el siglo de las obligaciones humanas”.

“Llego la hora de hablar menos y hacer más”, concluyó el exitoso empresario, dirigente de fútbol, y ahora jefe de Gobierno electo.