A partir del caso del jefe de Gobierno Jorge Telerman, todos los títulos de personajes públicos se pusieron en tela de juicio. Ni qué decir después de lo sucedido con Juan Carlos Blumberg, a quien todo el mundo conocía como “el ingeniero”, hasta que una información publicada en tapa de un matutino “deschavó” públicamente, erosionándole gran parte del crédito popular que el ahora candidato se había ganado.

De un tiempo a esta parte comenzó a circular por Internet una duda existencial promovida por muchos sectores, que apunta nada menos que contra quien figura al tope de todas las encuestas que miden las posibilidades presidenciales para el 28 de octubre. A partir de ello, comenzó a extenderse la presunción de no estaría tan claro el título de abogada obtenido por Cristina Fernández de Kirchner.

Para dar por finalizado el tema, la Asociación Defensa del Ciudadano se presentó ante la Justicia para solicitar que se investigue a la candidata por presunta “adulteración de instrumentos públicos”.

El titular de la citada asociación es Fabián Bergenfeld, quien es nada menos que hermano de la diputada kirchnerista Sandra Bergenfeld. Según explicó el propio Bergenfeld, el pedido se fundamenta en la necesidad de comprobar si Cristina Fernández tiene realmente los estudios “que ostenta en su currículum de la Cámara de Senadores”.

En declaraciones a Radio América, Bergenfeld expresó que la candidata “se ha arrogado facultades de jurista que no le corresponden, ha ostentado el título de jurista. Además, insertó en el currículum de la Cámara alta que es abogada”, y criticó que “de alguna manera, el presidente Néstor Kirchner está consintiendo esta situación”.

Bergenfeld sostuvo que la denuncia que impulsó contra la senadora nacional “es más grave” que la que recayó en su momento sobre el jefe de Gobierno, Jorge Telerman, por presunta usurpación de títulos. “Es más grave porque en este caso de trata de la alteración de un documento público, porque ella se presentó como abogada ante el Senado”, señaló.

Vale destacar que la senadora Kirchner se recibió en el año 1979, tres años después de su esposo. Según consta en su biografía Cristina K. La dama rebelde, la primera dama había hecho toda la carrera en tres años y después tardó otros tres en rendir las tres materias que le restaban para recibirse de abogada. Es que, recién casada con Néstor Kirchner, viajaron a mediados del 76 a Santa Cruz, luego de que el hoy presidente recibiera su título.

Y ella se resistía a volver a La Plata para rendir las materias pendientes en razón de la situación imperante por la vigencia de la dictadura militar.