La inactividad veraniega del Parlamento se alteró con la presentación ante la prensa hecha por la Coalición Cívica, cuya titular, Elisa Carrió, habló con muy duras palabras contra la política energética implementada por el Gobierno nacional.

Según Carrió, quien encabezó la conferencia de prensa flanqueada por el titular del bloque de la CC, Adrián Pérez, y la diputada Elsa Quiroz, “el kirchnerismo busca apropiarse del petróleo de todos los argentinos”.

Puntualmente, Carrió criticó la reciente venta de una parte del paquete accionario de la petrolera YPF al grupo empresario nacional Eskenazi. Al respecto, Carrió sostuvo que con esa operación, no es que la empresa pase a ser en parte argentina, sino “kirchnerista”.

De hecho, el informe de la Coalición Cívica fue presentado bajo el título “la kirchnerización del petróleo argentino”, y participaron de la presentación también el diputado Fernando Sánchez, impulsor de una iniciativa sobre el tema: la creación de una comisión investigadora en la Cámara baja, para indagar la compra del 25 por ciento de la empresa por parte de Eskenazi.

Al respecto, Carrió había hecho días pasados un juego de palabras al estilo kirchnerista, diciendo que “Eskenazi es Kirchner”, y ahora señaló que “se cierra el círculo de los 90. La matriz del saqueo que antes era la extranjerización, ahora se partriculariza en grupos económicos amigos del poder”.

También destacó que el negocio en torno a la explotación de los hidrocarburos es el tema “más grave que involucra a los argentinos y al futuro gobierno” y agregó que las valijas de Antonini Wilson “son una bijouterie al lado de esto”.

A su lado, el diputado Sánchez deslizó la posibilidad de que la compra de las acciones de la empresa petrolera se haya realizado con plata “en negro”, en el contexto de una operación de “lavado de dinero”.

Sánchez es precisamente el diputado que ocupó la banca de Carrió cuando ésta renunció a la misma para dedicarse a la campaña electoral.

El informe de la CC denuncia las presuntas irregularidades en la relación del kirchnerismo con el negocio petrolero y afirma que “es difícil creer que la empresa familiar de Eskenazi sea capaz de adquirir el 25 por ciento de la petrolera más importantede la Argentina”.