En su mensaje al país, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner hizo una referencia digna de resaltar. Recordó que en los siete meses que lleva de mandato no ha firmado ningún DNU.

Lo dijo como autoelogio y como crítica a los medios, por no haber resaltado ese detalle. Y se comparó con su esposo, récord en la materia.

No lo hizo como crítica hacia Néstor Kirchner –aunque sonara así-, sino como para destacar que los medios, a los que los K gustan cuestionar permanentemente, no hicieron hincapié en esa cualidad que, destacó, merecía ser destacada en letras de molde.

Aseguró además que no piensa utilizar esa prerrogativa que le otorga la Constitución desde su reforma en 1994. Que así sea.