Al final, el ex presidente de la Nación tendría decidido participar de las elecciones legislativas del próximo año, en las que no competiría por un escaño para diputado, sino que le apuntaría a la Cámara alta, por el principal distrito argentino.
El ex presidente Néstor Kirchner finalmente sería candidato en 2009. Ya no por una banca para diputado, como se había especulado hace algunos meses -cosa que se fue desvaneciendo con el paso del tiempo-, sino como candidato para el cargo que se especuló en un primer momento: para senador nacional.
La movida sería como se había manejado en un primer momento, forzando la renuncia del senador Eric Calcagno, quien es el último suplente que alcanzó a asumir en la banca tras las renuncias sucesivas de Cristina Fernández de Kirchner y Graciela Ocaña, y llamando a elecciones para cubrir el cargo.
La especie es promovida ahora en primera plana por el diario Clarín, según el cual el gobierno provincial convocaría a elecciones para cubrir la senaduría vacante una vez el senador Eric Calcagno presente la renuncia a su banca.
“El proyecto parece una respuesta tardía pero firme a las múltiples voces que desde el oficialismo reclamaron por una candidatura a Diputados de Kirchner hasta que la crisis obligó al Gobierno a cambiar la agenda. La jugada parece lejos de cualquier obediencia a las instituciones y persigue fines exclusivamente electorales y de conveniencia política”, señala la nota, que agrega que “aunque Kirchner deberá acreditar su domicilio en la Provincia (cuenta con que vive en Olivos desde 2003), la jugada se ajusta a la letra de la Constitución, que en su artículo 62 dispone: ‘Cuando vacase alguna plaza de senador por muerte, renuncia u otra causa, el gobierno a que corresponda la vacante hace proceder inmediatamente a la elección de un nuevo miembro?”.
La provincia de Buenos Aires se sumaría de este modo a otras ocho provincias que elegirán senadores el año que viene para la renovación de un tercio de la Cámara. A la par, se renovará la mitad de la Cámara de Diputados.
La información del matutino precisa que el propio Kirchner adelantó este fin de semana desde El Calafate a hombres de su confianza su determinación de lanzarse como candidato, luego de llegar a la conclusión de que el Gobierno juega su suerte en el principal distrito electoral del país, donde deberá enfrentar el doble desafío de una alianza entre la UCR y la Coalición Cívica y la unidad del hasta ahora disperso del PJ disidente.
Según la información, el plan incluiría a Graciela Ocaña como candidata suplente de Kirchner, cargo para el que en su momento fuera electa también, pero al que renunciara para asumir como ministra.
Calcagno en tanto podría ir como funcionario al flamante Ministerio de la Producción que conduce Débora Giorgi.