Silvia Vázquez fustigó al presidente del radicalismo por oponerse a la reforma de la ley de Radiodifusión.
La diputada nacional Silvia Vázquez consideró que las declaraciones del senador Gerardo Morales con relación a la modificación de la ley de radiodifusión, “van en contra de los antecedentes históricos de la Unión Cívica Radical en la materia”.
“Este señor -dijo sobre el senador jujeño- quiere torcer la historia de un movimiento político más que centenario y se opone a que el Parlamento, después de 25 años de democracia cambie una ley de la dictadura más atroz que haya soportado en su historia el pueblo argentino”.
La presidenta del Partido de la Concertación sostuvo que las palabras del legislador “desconocen la plataforma que sostuvo Raúl Alfonsín en 1983, como así también los innumerables proyectos presentados por legisladores radicales a los largo de 25 años, muchos de los cuales se encuentran contenidos en los fundamentos del proyecto que presentamos en diciembre de 2008”.
La legisladora por Buenos Aires aseveró que Gerardo Morales habla con un total desconocimiento del tema y manipula el poder de la pantalla y del papel para confundir a la opinión pública, utilizando técnicas de manipulaciones falaces, similares a las usadas por Joseph Goebbels bajo el nazismo: miente, miente, que algo quedará”.
La diputada Vázquez sostuvo que el senador Morales como parte de una oposición poco seria, impotente y vacía de propuestas miente al decir que del parlamento va a surgir una ley monopólica y contraria a la libertad de expresión, cuando en realidad el espíritu generalizado es justamente lo contrario, porque las corporaciones mediáticas que tantos centímetros y minutos le dan al senador Morales, no defienden la libertad de expresión del conjunto del pueblo. En realidad luchan para proteger el negocio de la libertad empresaria en detrimento del verdadero ejercicio del derecho a la información, que es patrimonio de toda la sociedad.
La legisladora nacional concluyó que “debemos tomar conciencia de la importancia que reviste para la vida de los argentinos la sanción de una ley de radiodifusión de la democracia e instó a la ciudadanía en general a defender la pluralidad en el otorgamiento de licencias, el derecho a la libre circulación de la información, a una distribución justa de la palabra, y a apoyar el tratamiento de la ley para poder saldar esta vieja deuda que la democracia tiene con su pueblo”.
