Las internas dentro del espacio del PJ enfrentado al kirchnerismo tienen repercusión en el Congreso y una clara demostración es la renuncia del jefe de bloque. Felipe Solá explica su decisión por la campaña electoral. ¿El PF se unificaría con el PRO?
La confirmación de Felipe Solá al frente del bloque del Peronismo Federal en Diputados por parte de su par Enrique Thomas se transformó en un bumeran político que reabre las diferencias entre los sectores que conforman el espacio peronista distanciado del gobierno nacional.
Según publica La Nación, “abocado a su campaña como precandidato presidencial, Felipe Solá decidió renunciar como jefe de bloque de diputados del Peronismo Federal”. Sin dudas, la sucesión desatará la primera puja interna de este año electoral entre las principales figuras que conforman ese espacio no kirchnerista. Justamente, un hecho que Thomas, en la entrevista con Parlamentario.com, afirmaba que se debía evitar y el objetivo primordial era “mantener unido al bloque”.
Una semana después de las declaraciones del diputado mendocino a este medio, Solá abandonó su cargo y evidenció que será muy difícil la convivencia entre los peronistas disidentes en un año electoral.
En el Peronismo Federal conviven referentes de Eduardo Duhalde, de Francisco de Narváez, de Solá, de Carlos Reutemann y de Alberto Rodríguez Saá. Pese a los roces que hubo y hay entre ellos, el bloque logró mantenerse unido pero ya hay peleas por la presidencia del bloque: Eduardo Amadeo, suena como su reemplazante.
Las internas. Felipe Solá no estaría de acuerdo en ceder ese espacio al duhaldismo –según el matutino-. Tampoco acepta una eventual unificación entre su bloque y el de Pro, de Mauricio Macri, también candidato presidencial y posible protagonista de un acuerdo electoral con un sector del PJ disidente en las elecciones de octubre.
De Narváez ya hizo saber que no le interesa que un referente suyo ocupe la vacante de Solá, pero también hizo trascender sus condiciones: si él llegase a ser candidato a gobernador de Buenos Aires en una hipotética alianza entre el PJ disidente y Pro, reclamará para su espacio la presidencia del bloque de diputados provinciales, como también el primer candidato a senador nacional de Buenos Aires. El duhaldismo reclamó para sí la presidencia de la bancada bonaerense y el macrismo, la vicepresidencia.
Como se verá, la disputa por el reparto de cargos ya comenzó en el PJ disidente. En la Legislatura bonaerense se iniciaron tratativas para unificar las bancadas del peronismo disidente y de Pro, aunque por ahora no hay fumata blanca. “Hay voluntad de avanzar”, adelantó a La Nación el diputado Gustavo Ferrari, mano derecha de De Narváez.
La jefatura del bloque de diputados nacionales del Peronismo Federal se dirimirá el próximo martes cuando finalice la Asamblea Legislativa en la que la presidenta Cristina Kirchner inaugurará las sesiones ordinarias. Allí se conversará no sólo quién será el sucesor de Solá, sino también la conveniencia o no de unificar fuerzas con Pro. Un intento que fracasó el año pasado por la negativa de Solá.
