En la inauguración de las sesiones legislativas, la Presidenta dio mimos a algunos funcionarios y legisladores nacionales pero criticó elípticamente a otros y omitió nombrar al ministro de Economía, Amado Boudou.
La carrera electoral se metió de lleno en la Asamblea Legislativa y tuvo a los mimados por Cristina Kirchner y otros que fueron cuestionados u olvidados.
Inseguridad. Un tema sensible para la sociedad es sin dudas el alto porcentaje de delitos que ocurren, principalmente, en el Conurbano bonaerense. En esta parte del discurso, Cristina giró su cuerpo y miró directamente al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, y sumó un capítulo más a la novela desatada por los cuestionamientos a la política de seguridad del ministro Ricardo Casal. “No hay que usar la falsa dicotomía de la mano dura” y remató: “No tiene que haber una utilización electoral publicitaria. Es muy mediocre usar la tragedia de la muerte de alguien”. Claramente, el cuestionamiento político fue dirigido para Scioli, quien es en la actualidad un personaje clave por el armado político con los intendentes del Conurbano para las elecciones presidenciales.
Otro hombre clave en el armado político es el secretario general de la CGT, Hugo Moyano, quien sorprendentemente también recibió un cuestionamiento por parte de la jefa de Estado.
Al mencionar la recuperación de Aerolíneas Argentinas y la inversión que se hizo durante 2010, Cristina les pidió a todos los sindicatos de la actividad aeronáutica que hagan un esfuerzo “para que puedan viajar los usuarios”. Y agregó: “No hay que utilizar la lógica de los monopolios comerciales”. Mirando a los sindicalistas presentes (Omar Viviani –taxista-, Hugo Moyano), les sugirió con un tono de voz más firme: “Los critican –en referencia a los medios de comunicación y empresario- para desprestigiarlos ante la sociedad. Pero lo que les molesta es el grado de participación de los trabajadores con el salario mínimo más alto de Latinoamérica. Lo otro es la excusa porque no les interesa que un trabajador no pueda viajar.”
Vetina. Mauricio Macri (PRO), uno de los principales rivales del kirchnerismo en las elecciones presidenciales, recibió un duro cuestionamiento por parte de la Presidenta. “El Gobierno de la Ciudad bate el record de vetos 9.28 por ciento” después de casi cuatro años de gestión. “Había algunos que iba haber una vetocracia y sería ‘Vetina’ y no Cristina”, dijo la primera mandataria.
Mimos y olvidos. La Presidenta elogió la labor realizada en temas de derechos humanos por la Justicia y en especial mencionó varias veces al presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti. Otro nombrado fue el ministro del Interior, Florencio Randazzo; la ministra de Seguridad, Nilda Garré; el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, al ex ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Baragnao; y Mercedes Marcó Del Pont, presidenta del Banco Central.
Entre los legisladores, fueron pocos los nombrados por Cristina y ninguneó al Cuerpo al demostrar que desconoce a la mayoría de sus integrantes. Citó a los jefes de bloque del oficialismo Miguel Ángel Pichetto (Senado) y Agustín Rossi (Diputados) y les reconoció su labor. También nombró a la oficialista fueguina Roxana Bertone (posible candidata a gobernadora), Daniel Filmus y la senadora Blanca Osuna (FpV).
