Pasaron las primarias y se aprestan los detalles finales de cara a la elección general del próximo 23 de octubre. Los bonaerenses ejercerán nuevamente sus plenos derechos y profundizarán su ejercicio democrático cuando elijan presidente, gobernador, intendentes y legisladores que los representen tanto a nivel nacional como provincial y municipal.

Desde la responsabilidad institucional que implica su rol como presidente de la Cámara de Diputados, Horacio González analizó el escenario electoral del corto plazo y el reconocimiento que los ciudadanos brindaron a los hombres y mujeres que integran el Frente para la Victoria y que gestionan el Estado en todas sus expresiones.

“Somos protagonistas de un proyecto verdaderamente transformador”, aseguró el titular del cuerpo legislativo, quien también encabeza la lista de candidatos a diputados provinciales en la Primera Sección Electoral, que en las primarias superó el millón de votos. “El desafío es poder decirles a los argentinos cuál va a ser el país para los próximos 20 años”, puntualizó.

– Si usted tuviera que poner en valor los principales argumentos que ha tenido el Gobierno nacional y en sintonía, el provincial, para obtener esta cantidad de votos, ¿cuál cree que fue?

– Las políticas de Estado que ha llevado adelante la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que han permitido un crecimiento único en la historia del país. Ella es quien encabeza un proyecto de transformación y de inclusión, en donde la participación y el compromiso son una consecuencia de la solidez demostrada mediante los logros obtenidos por nuestro Gobierno a favor de la Argentina. Coincido con la presidenta cuando señala que es fundamental que todos los argentinos comprendamos que estas ya no pueden ser políticas de un sector o de un partido, sino de todos, asumidas por la dirigencia política, empresarial, sindical y social.

– ¿Cuáles deberían ser los pasos a seguir de aquí al 23 de octubre para recibir el mismo respaldo en las urnas?

– Debemos tomar conciencia del tiempo histórico que nos toca vivir, con un crecimiento económico inédito para los 200 años de nuestra patria, sustentado en la generación de puestos de empleo, inclusión social y una inversión jamás vista en educación, una apuesta fundamental para las futuras generaciones. Estamos ante un momento excepcional de la Argentina, ya sea desde lo institucional, económico, social y cultural, y lo mismo pasa con la Provincia, que está más pujante que nunca, en franco crecimiento y con muchísimas expectativas positivas. Es un proyecto que ha llevado a este país al Estado de justicia que todos los habitantes requerían. Por la tanto, la mejor campaña que uno puede hacer es seguir trabajando. La gente considera que Cristina Fernández de Kirchner es la persona indicada para llevar adelante todo lo que todavía falta hacer por este país, por la Provincia, y también por todos los municipios. Un claro ejemplo es lo que hicimos en la Cámara de Diputados una semana antes de las primarias. Hemos logrado sancionar la modificación de la Ley de Ejecución Penal, un programa que garantice la reinserción social para liberados que cumplieron sus condenas y la descentralización del Tribunal de Casación, con la finalidad de acercar aún más los servicios de justicia a la ciudadanía. Demostramos que la gestión está por delante de cualquier coyuntura.

– ¿Lo sorprendió que el FpV haya ganado en casi todos los distritos de la provincia, incluidos los netamente agropecuarios?

– No, porque siempre que nosotros hemos discutido y planteado cada uno de los temas lo hicimos imaginando el beneficio de todos los sectores. Tenemos un Gobierno que está pensando en la sociedad en su conjunto: en la gente del interior, en la gente del conurbano, en aquellos que habitan los grandes centros urbanos pero también en función de los pueblos del interior. Y también quedó claro que el voto no es transferible hacia ningún candidato, porque la voluntad popular cada dirigente tiene que ganársela. Aquellos que creían que por el simple hecho de enfrentarse al Gobierno iban a tener el beneplácito de la población, chocaron con un duro revés en manos de la población. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, sin lugar a dudas, es la persona que conduce este proyecto, y está muy arriba en la consideración de la población, pero también el gobernador Scioli ha sido muy votado, como los intendentes y los candidatos a diputados. Queda claro que el trabajo en equipo es altamente estimado por la ciudadanía.

La profundización del modelo y los jóvenes

Horacio González logró, con su presidencia, una Cámara de Diputados de “puertas abiertas”, basada en un fuerte vínculo con la ciudadanía y transparencia en la gestión como valores primordiales. Los ejes de su labor pretenden el consenso de políticas clave para el Gobierno de Daniel Scioli, articulando planteos de la oposición parlamentaria y las necesidades de los municipios. Más allá de su responsabilidad institucional, el titular del Cuerpo legislativo también dedica la entrevista para aportar una mirada en perspectiva de los avances que logró el país en todas sus áreas y para celebrar los espacios de inclusión para los jóvenes. “Nuestra obligación es darles un país diferente al que tuvimos nosotros”, afirma.

– Cuando se habla de profundizar el modelo ¿a qué se está haciendo referencia?

– El nuestro es un modelo que ha permitido la construcción de un país sustancialmente diferente y con certezas, sentando nuevas bases y un modelo de acumulación económica con inclusión social como nunca se había visto. Los números e indicadores reflejan realidades, con un crecimiento del 9,1% para superar con éxito la crisis económica más dura que se tenga memoria, y concluyendo con la etapa de endeudamiento más importante en la historia del país. El crecimiento de las reservas del Banco Central durante el último ejercicio fue del 13,4%. Lo sustancial fue que hemos utilizados esas reservas para desendeudarnos y no solicitando crédito externo para seguir endeudándonos. Por primera vez en su historia, la Argentina supera la recaudación impositiva en más de 100 mil millones de dólares. Y hablo sobre facturación declarada en blanco. Vamos por el desafío de vencer la evasión fiscal. Pero quiero enfatizar en algunos efectos directos. El 9% del PBI ha sido transferido a las provincias para permitir el desendeudamiento de cada una de ellas y lograr una mejor situación financiera. Ha retornado el crédito a la Argentina, y hablo del crédito popular. Del 2003 a la fecha, el consumo con tarjetas de crédito creció el 1.019%, y en las de débito, donde se reintegra el 5% del IVA a cada consumidor, hemos crecido un 1.171%.

– Según su óptica, ¿el crecimiento económico se transformó en desarrollo?

– Mire, hay una realidad fáctica: la generación de más de cinco millones de puestos de trabajo generó consumo y reactivación en el desarrollo industrial. El crecimiento industrial promedio en estos años ha superado el 87%, sobresaliendo la automotriz, textil, calzado y construcción. Es un récord histórico. La sustitución de importaciones ha significado el cuidado del mercado interno y un formidable aporte a la balanza comercial, alcanzando un superávit comercial de más de 12.000 millones de dólares, que junto al superávit fiscal, son los pilares que sostienen este modelo desde el 2003. Eso nos permitió inaugurar más de 1000 escuelas en la República Argentina y destinar más del 6% del PBI a la educación. ¿Hay más apuesta al futuro qué esa? En Ciencia y Tecnología de 870 millones en el 2003, hoy se invierten 5.000 millones de pesos desde la creación del Ministerio. Los más de 1.800 convenios colectivos de trabajo, y un salario mínimo que es el más alto de América Latina, es una muestra inequívoca del grado de participación de los trabajadores, que son los primeros beneficiarios de este modelo que ha dignificado al trabajo argentino.

– ¿Qué rol le cabe a los jóvenes en la construcción del proyecto con miras al futuro?

– Lo que no se puede hacer es renunciar a la política para entregar el sistema de decisiones a las corporaciones. Quienes más claramente han entendido este mensaje son los jóvenes, que se han incorporado a la construcción política en favor de los argentinos. Nuestra obligación es darles un país diferente al que tuvimos nosotros, provengan de donde vengan. El desafío es poder decirles a los argentinos cuál va a ser el país para los próximos 20 años, continuando con los cambios estructurales con políticas sostenidas en el tiempo, para nuestros hijos y para nuestros nietos. En nosotros mismos tenemos la fuerza para seguir adelante.