Ocho diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires y 10 legisladores provinciales presentaron en un hotel céntrico de la ciudad de La Plata, el Frente Unidad Peronista (FUP).
Ocho diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires y diez legisladores provinciales presentaron en un hotel céntrico de la ciudad de La Plata el Frente Unidad Peronista (FUP), cuyas estrellas políticas son los legisladores nacionales Francisco de Narváez, Graciela Camaño y el intendente de Malvinas Argentinas Jesús Cariglino.
“Este espacio surge con el fin de construir un peronismo más amplio, abierto y participativo. Un peronismo que no reniegue de sus principios, sino que reivindique la justicia social, la igualdad y la solidaridad como los valores fundamentales de su accionar político”, se consigna en los primeros párrafos del documento que los dirigentes suscribieron.
Los diputados nacionales que toman parte del grupo son Alfredo Atanasof, Carlos Brwon, Graciela Camaño, Francisco de Narvaez, Gustavo Ferrari, Natalia Gambaro, Alberto Roberti y Claudia Rucci.
En la formalidad de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, por el momento, los dirigentes que adhieren a este espacio de “construcción política” no tienen decidido la conformación de bancadas propias; que integrarían ocho diputados: Mónica López, María Torresi, Gonzalo Atanasof, Mauricio D’Alessandro, Guillermo Britos, Fernando Rozas; todos ellos del bloque Unión Celeste y Blanco; más los diputados Rubén Eslaiman y Carlos Acuña, actualmente del bloque Pro Peronista. Por el lado de la Cámara alta bonaerense dos son los senadores que hasta ahora están anotados en el FUP, Roque Cariglino y Nidia Moirano, ambos integran actualmente el bloque de Unión Pro Peronista.
El comunicado suscripto expresa textualmente lo siguiente:
“Este espacio surge con el fin de construir un Peronismo más amplio, abierto y participativo. Un Peronismo que no reniegue de sus principios, sino que reivindique la justicia social, la libertad, la igualdad y la solidaridad como los valores fundamentales de su accionar político.
“La Argentina es hoy un país que crece sin desarrollarse, que retrocede estructuralmente día a día en términos de distribución del ingreso, contrariando nuestras más elementales premisas doctrinarias. Manifestamos firmemente la necesidad de que los gobiernos, nacional y provincial, estén ante todo al servicio de su pueblo.
“Debemos cambiar este modelo de gobierno en donde las decisiones más importantes son definidas unilateral e intempestivamente, en contra del interés común y careciendo de todo sentido de la planificación. Debemos plantear una verdadera estrategia de desarrollo inclusivo y sustentable, con una visión integradora y plural.
“Sostenemos que es necesario defender las instituciones básicas de nuestra democracia. Y, para ello, reclamamos que se respeten a rajatabla la independencia de poderes y la libertad de expresión, pilares fundamentales de este sistema.
“La política debe volver a ser una herramienta de cambio, transformación y compromiso. Queremos funcionarios que rindan debida cuenta sobre sus actos, funcionarios que no se escuden en sus fueros y/o privilegios para evadir el accionar de la Justicia. Exigimos un Poder Judicial independiente.
“Es necesario terminar con este “capitalismo de amigos”, en donde unos pocos se adjudican impunemente las inversiones para nuestro futuro. La administración pública debe contar con normas que faciliten el contralor ciudadano con relación a la gestión del Estado, propiciando la libre accesibilidad a la información, la publicidad de los actos de gobierno y la racional y honesta asignación de los recursos públicos. Para ello, se requiere la autonomía de la Justicia, organismos de control y entes reguladores; y la disposición de nueva tecnología que permita el público acceso a las cuestiones públicas.
“La relegación de nuestra querida provincia de Buenos Aires por parte del gobierno nacional es un caso paradigmático en este sentido: producimos el 40% de la riqueza del país, aquí se concentra casi el 40% de la población y aportamos más del 35% del PBI nacional; sin embargo, apenas recibimos el 20% de los fondos coparticipados.
“El conurbano bonaerense presenta una de las realidades más acuciantes del país, con crecientes niveles de pobreza, marginalidad y exclusión. La inseguridad es una realidad palpable hasta en los pueblos más chicos del interior de nuestra provincia. Flagelos como la drogadicción y el alcoholismo afectan cada vez más a nuestros ciudadanos. “Necesitamos refundar los valores perdidos a lo largo de muchos años de abandono e indiferencia. La cultura del esfuerzo y del trabajo, así como la educación, fueron los pilares que forjaron un país pujante.
“Por todo ello, manifestamos nuestro inquebrantable compromiso con las siguientes pautas programáticas, que guiarán en todo momento nuestra acción política:
“a) Garantizar una auténtica universalización de políticas sociales para lograr que millones de compatriotas sumidos en la pobreza e indigencia recuperen su dignidad; b) Desarrollar infraestructura social básica, garantizando la universalización del acceso a servicios públicos esenciales, así como políticas orientadas a resolver el grave déficit habitacional; c) Propiciar una política de empleo que brinde puestos de trabajo de calidad y decentes, con un mercado laboral más integrado que no solo deberá corregir las distorsiones macroeconómicas sino también que impulse un ambicioso proceso de mejora en la calidad institucional. Deberá incluir la modernización de las regulaciones laborales y el fomento de la relación directa entre educación y empleo, conforme a las vastas zonas de nuestra provincia. d) Impulsar políticas que garanticen de manera eficaz y la seguridad física y jurídica de todos los ciudadanos. La prevención debe ser la herramienta que nos permita ofrecer a la ciudadanía una vida segura en un estado de derecho pleno. e) Promover el federalismo a través de la construcción de los consensos políticos necesarios, que permitan introducir una reformulación integral del sistema de coparticipación federal de impuestos para asegurar la automaticidad en la percepción de los municipios –hoy con una escasa participación relativa- de un modo fiscalmente responsable, con metas objetivas, convergiendo progresivamente hacia un esquema transparente y justo de distribución de los recursos fiscales entre los tres niveles de gobierno; y que además tienda a atenuar las fuertes asimetrías regionales; f) Generar políticas destinadas a viabilizar un desarrollo más equilibrado y sustentable, evitando que millones de ciudadanos sigan engrosando bolsones de pobreza alrededor de los grandes centros urbanos. Debemos integrar estratégicamente, sobre la base de sus potencialidades y ventajas comparativas, a todas las regiones productivas del país y particularmente de nuestra provincia; g) Respetar y hacer respetar las instituciones fundamentales de la democracia. Debemos recuperar el papel de los partidos políticos y hacer funcionar eficientemente los organismos de control del Estado.
“Reafirmamos por tanto nuestra pertenencia peronista y ratificamos nuestro compromiso con los valores auténticos e irrenunciables del Peronismo: justicia social, independencia económica y soberanía política.
“Invitamos a sumarse a esta enorme tarea a todos los legisladores y funcionarios nacionales, provinciales y municipales; a todos los referentes políticos, empresariales, sindicales, sociales e intelectuales; y a todos aquéllos que compartan nuestros principios y estén dispuestos a trabajar en el logro de estos objetivos”.
