La medida fue anunciada por la presidenta de la Nación y el ministro de Economía, con la intención de eliminar la autorregulación y disponer la fiscalización estatal, con el fin de asegurar la transparencia. Para ello, se le darán nuevas atribuciones a la Comisión Nacional de Valores.
Tal como lo anunciara la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, ingresó al Congreso el proyecto de ley para otorgarle nuevas atribuciones a la Comisión Nacional de Valores (CNV), el regulador de los mercados en Argentina.
La iniciativa, que lleva las firmas del jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y los ministros de Economía, Hernán Lorenzino, y de Justicia, Julio Alak, consta de 155 artículos y comenzará su trámite en la Cámara de Diputados: ya fue girada a las comisiones de Finanzas, que preside Carlos Heller (Nuevo Encuentro) y Presupuesto, al mando de Roberto Feletti (FpV).
La medida modifica la Ley 17.811 de 1968, que regula la oferta pública de valores negociables y los agentes bursátiles.
Según detalló la primera mandataria, es necesario un nuevo marco institucional para que el mercado de capitales sea “más transparente, accesible y simplificado” y que así todos los argentinos encuentren alternativas de inversión en su propio país, ya que en la actualidad, para poder operar en un mercado, se requiere ser titular de las acciones del mismo.
El principal objetivo de este proyecto, tal como consta en el mensaje del Poder Ejecutivo, es “fortalecer la capacidad de regulación y supervisión del Estado Nacional sobre los mercados, promoviendo su apertura, competitividad y orientación hacia la economía real”.
Lorenzino precisó que, entre otros fines, se busca eliminar la autorregulación y disponer la fiscalización estatal. En ese sentido, contempla una ampliación de las facultades de la CNV y lo designa como el único organismo de control de la oferta pública, función que hoy por hoy se encuentra en manos de entidades privadas.
La norma actual, que data del gobierno de facto de Juan Carlos Onganía, “fue consecuente con la minimización del rol del Estado y la maximización del mercado como articulador central de las relaciones financieras y económicas”.
Otro factor determinante en la elaboración de este proyecto fue la crisis financiera internacional desatada en 2008, que provocó que muchos países modifiquen la regulación y supervisión de sus sistemas financieros.
La iniciativa va en línea con la reforma del sistema financiero iniciada a principio de año con la modificación de la Carta Orgánica del Banco Central.
