El jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri no pudo escapar al convite para asistir -más allá de su pasión xeneize- a la Legislatura donde el jugador de Boca Sebastián Battaglia iba a ser distinguido como “Personalidad Destacada del Deporte”. Por un lado, recibió directamente la invitación del homenajeado, y por el otro, de quien había […]
El jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri no pudo escapar al convite para asistir -más allá de su pasión xeneize- a la Legislatura donde el jugador de Boca Sebastián Battaglia iba a ser distinguido como “Personalidad Destacada del Deporte”. Por un lado, recibió directamente la invitación del homenajeado, y por el otro, de quien había organizado el acto, la legisladora del bloque Bases para la Unión Adriana Montes, quien desde un tiempo viene acompañando las iniciativas del Pro en el recinto. El acto de caballerosidad de MM con la diputada obedece a un compromiso para con sus legisladores que por estas horas están juntando los votos para aprobar las leyes más importantes para la administración de la Ciudad.
Pero el compromiso también se extendía hacia el jugador, quien también invitó al ex DT, Carlos Bianchi, con quien Macri cortó su relación personal en 2004. Pese al espinoso escenario, el jefe de Gobierno asistió, e incluso posó para los fotógrafos junto al “Virrey”. Eso si, para la ceremonia a Bianchi lo sentaron en la segunda fila y lejos de Macri. En rigor, MM jugó a dos bandas y quedó bien con Battaglia y Montes.