La sesión para el traspaso del subte prevista para este miércoles a las 11 ingresó a un cuarto intermedio hasta la tarde. Primero se habló de reanudarla a las 16, luego después de las 17.30 y posteriormente pasadas las 19. Todas esas postergaciones son para dar lugar a las negociaciones que permitan destrabar la situación y alcanzar un acuerdo para permitir el traspaso del subte a la órbita porteña.

En ese marco, el jefe del bloque del Frente para la Victoria, Juan Cabandié, admitió primero el avance de las negociaciones para alcanzar un acuerdo, cosa que corroboró luego el vicepresidente 1° de la Legislatura, Cristian Ritondo.

En ese sentido, pudo saberse que está prácticamente arreglada la situación con los metrodelegados, acondicionando el texto del proyecto a ciertas requisitorias de los trabajadores del sector. También se habría acordado que el período de emergencia que en principio el Pro reclamaba por 5 años, se redujera a uno, extensible a otro más.

En cuanto al financiamiento, que era la cuestión más complicada, en un primer momento se dijo que la llave del arreglo sería cambiar el impuesto sobre los combustibles por un impuesto sobre los cigarrillos. Sin embargo el propio Ritondo señaló luego que el financiamiento no pasaría ni por combustibles, ni por cigarrillos, sino por un impuesto a los sellos de todas las transacciones del ámbito de la Ciudad.

En definitiva, según pudo saber parlamentario.com, se habría acordado un bono de 300 millones de pesos, más el impuesto a los sellos, que permitiría recaudar otros 300 millones.

Por otra parte se supo que el gobierno porteño logró colocar bonos por 85 millones de dólares y recibió ofertas por 175 millones al 6% anual, lo cual es considerado un éxito.

Con ese tono optimista, se esperaba que aventados los desacuerdos la ley del traspaso de los subtes pudiera ser aprobada por alrededor de 40 votos.