Fabián Rogel los cuestionó por “hablar de generalidades”, buscar la “comodidad” de la prensa, y “evitar” definiciones sobres los “grandes intereses que están en juego en el país”. Además, alentó la idea de un frente pero reclamó la candidatura presidencial para la UCR.
La interna de la UCR entre Julio Cobos y Ernesto Sanz generó cortocircuitos en el partido centenario por las fotos que ambos dirigentes se sacaron con Fernando “Pino” Solanas de Proyecto Sur y Hermes Binner del FAP, respectivamente.
“Las recientes fotos aparecidas en los medios nacionales, donde se sigue buscando la comodidad de los medios de prensa para instalar una idea política, es un camino equivocado. Hablar de generalidades, hablar de la institucionalidad del país como un eje central, y evitar definirnos sobre los grandes intereses que están en juego hoy en país, nos reducirá solo a una foto vacía de contenidos y sin el apego popular necesario no solo para ganar la elecciones sino para sostenernos en el gobierno”, manifestó el diputado nacional Fabián Rogel.
Además, el legislador entrerriano cuestionó las conversaciones de la cúpula del radicalismo con dirigentes del FAP, Proyecto Sur y la Coalición Cívica porque la alternativa al peronismo en la Nación y en la provincia no puede salir de un rejuntadero de dirigentes”.
“No se trata solo de instalarse mediáticamente sino sabemos cuántos somos y qué pensamos. Esto será la conclusión de un encuentro de partidos, tras un proyecto de Nación y no la picardía o la pequeña jugada de algunos dirigentes que se quieren aventajar a sí mismo o que quieran oficiar de gerente de las minorías de cada uno de los partidos”, agregó y advirtió que “la penosa y traumática experiencia de la alianza, no tenemos ningún derecho a repetirla, si es que nos interesa la gente”.
En este marco, Rogel dijo estar “convencido” de que “el candidato a presidente de la Nación para el 2015 debe ser un hombre del radicalismo, compartiendo la formula con alguien de otra fuerza política”.
De esta manera, descartó que su partido fuera acompañar la candidatura presidencial del líder del FAP, Hermes Binner, o de cualquier otra fuerza política, porque “cualquier otra ingeniería electoral fracasará por falta de desarrollo territorial y porque se convertirá en una expresión de arreglos dirigenciales o de marketing político, ajeno a un proyecto nacional de país”.
