Con la presencia de Oscar Parrilli, la comisión que preside Teresa García analizó el proyecto que este miércoles obtuvo dictamen del Senado.
A puertas cerradas y bajo estricto secreto, la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia rompió la inactividad para analizar el proyecto oficial que este miércoles obtuvo dictamen en el Senado.
El cuerpo que preside la oficialista Teresa García recibió al secretario de Inteligencia, Oscar Parrilli, quien al finalizar la reunión sacudió a la prensa con la noticia de que se relevará a Antonio “Jaime” Stiusso de guardar secreto “de todo lo que sabe o hizo desde 1972 hasta el 5 de enero de 2015”.
El encuentro, que tuvo lugar en el sexto piso del edificio de La Caja de Ahorro –utilizado con Anexo del Senado- comenzó cerca de las 11 con la presencia de legisladores oficialistas y opositores, y se extendió durante casi dos horas.
Allí se volvió a analizar el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo para crear la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en reemplazo de la actual SI, que este miércoles sufrió modificaciones a instancias del CELS de Horacio Verbitsky.
Sin embargo, Parrilli arrastró toda la atención, al informar que el Gobierno le comunicará a la fiscal que investiga la muerte de Alberto Nisman, Viviana Fein, que “Stiusso está relevado de guardar secreto” porque “la presidenta quiere que se cuente todo”.
Al salir de la reunión, García destacó el “coraje” de la presidenta de la Nación, Cristina Kirchner, para “cambiar la conducción política de la Secretaría de Inteligencia”.
En tanto, el diputado radical Miguel Bazze insistió en que “los organismos de inteligencia deben tener un mejor control” y que “existen tareas de inteligencia que desarrollan fuerzas de seguridad y la propias Fuerzas Armadas”.
Entre las diferencias con la iniciativa oficial, Bazze repitió que las escuchas telefónicas deben pasar a depender de la Corte Suprema en lugar del Ministerio Público, “que no da garantías”.
Además, pidió que “sólo un juez pueda proponer la desclasificación de un informe o la destrucción de archivos” antes del plazo fijado de 25 años, al indicar que “eso no puede ser un resorte del Poder Ejecutivo”.
Bazze también reclamó en nombre de su bloque que “el control de la administración del presupuesto de los organismos de inteligencia se realice desde el Congreso de la Nación a través de la Auditoría General de la Nación, considerando que la AGN es una institución que depende del Parlamento nacional”.
“Nadie da detalles de por qué las Fuerzas Armadas tienen un presupuesto destinado a Inteligencia cada vez más importante cuando seguramente ese dinero se dedica a hacer Inteligencia interior, tarea que las Fuerzas Armadas no pueden realizar”, denunció.
Asimismo el diputado propuso que la bicameral tenga mayoría de la oposición, “precisamente para evitar que ocurra como hasta ahora, que el oficialismo impidió el control de los servicios de inteligencia”.
El proyecto será tratado el miércoles en el recinto de la Cámara alta sin la presencia de la oposición, que ya anunció su ausencia. El único espacio anti K que participará del debate será el Interbloque Federal de Adolfo Rodríguez Saá.
No obstante, el Frente para la Victoria anticipó este miércoles que el texto del Poder Ejecutivo podría sufrir más modificaciones en el recinto, cuando obtendría media sanción.
En el dictamen firmado en el plenario de comisiones se precisó la descripción de la actividad de Inteligencia y se dejó explicitada la diferencia entre Inteligencia militar o de defensa y la Inteligencia de seguridad interior.
Además de Teresa García, la bicameral está integrada por los kirchneristas Miguel Pichetto, Pedro Guastavino, Juan Manuel Irrazábal, Juliana Di Tullio y Gladys Soto.
Por la oposición figuran Silvia Majdalani (Unión Pro), Gustavo Valdés, Juan Carlos Marino (UCR), Roberto Basualdo (Producción y Trabajo) y Oscar Castillo (Fte. Cívico y Social de Catamarca).
