Para la presidenta del bloque oficialista de Diputados, Juliana Di Tullio, quedó demostrado este domingo que Cristina Fernández de Kirchner es “la única estadista que hay en la Argentina”. Asimismo resaltó que “el sueño de tener los trenes en manos de los argentinos es realidad con esta presidenta”.

“La oposición no aplaude ni los trasplantes realizados, ni la defensa de Malvinas, ni siquiera las leyes que enumeró la jefa de Estado que hemos votado porque tienen la misma actitud siempre: no votan, no aplauden, no nada”, criticó la jefa del bloque del FpV.

Agregó Di Tullio que “los argentinos tenemos mucha suerte de tener esta presidenta, suerte y honor. El país que nos deja es de inclusión, soberanía y oportunidades. Hoy era un día para aplaudirla a Cristina de pie, junto a la oposición. Con Cristina los argentinos volvimos a soñar”. A su juicio, Cristina “fue la presidenta que puso blanco sobre negro sobre los proyectos de Nación que se dirimen: uno para unos pocos con poder concentrado y otro para los 40 millones de argentinos y de entrega con el pueblo”.

Asimismo señaló que “hoy la presidenta le explico a la oposición en que mundo vivimos para que entiendan lo ridículo de la denuncia de Nisman”.

A su vez, la secretaria parlamentaria del bloque kirchnerista, María Teresa García, resaltó que “más de 400 mil personas acompañaron el mensaje ante el Parlamento de la presidenta de la Nación”, y consideró que la persidenta “no solamente hizo el balance que le indica el mandato Constitucional, sino que marco el camino recorrido por su gobierno y el de Néstor Kirchner desde el 2003 a la fecha”.

“Incontrastable, irrefutable, los números mandan. Y mandaron durante todo su discurso, jubilados, jóvenes, mujeres, empleo, salud, educación, energía, ciencia y tecnología, ferrocarriles, línea de bandera”, estimó. A su juicio, “cada uno de esos temas fue explicado. Mostró el crecimiento desde los orígenes, cuando casi habíamos desaparecido como Estado y como Sociedad”.

Para García, la presidenta “mostró una valentía pocas veces vista, cuando algunos empleados de los medios y el poder económico atisbaron a levantar unos carteles sobre el tema AMIA”. En ese sentido dijo que “no quedó rincón sin recorrer por la historia de la voladura de AMIA, y el atentado a la Embajada. Cuestionó, interpeló, indicó a quien había que hacer responsable de una causa misteriosamente paralizada”.

“Cuestiono la denuncia sobre su persona, la destrozó -agregó-. No hubo un resquicio de duda en sus palabras. Nadie nunca se animo, tal vez por miedo. Tal vez por intereses implicados”. Sostuvo que Cristina “desnudó la cobardía ajena y lució la valentía propia.

Para terminar, sostuvo que “con certeza para los 400 mil que la acompañaron, con el convencimiento de los legisladores que votamos cada articulo de cada ley, y con la conciencia despierta de millones de argentinos, definió con claridad el futuro”, y con vistas al momento en que Cristina deje el poder, advirtió que, “como dicen en el barrio, ‘va a ser difícil jugar después de Maradona’”.