En la primera sesión ordinaria del año, que duró dos horas, el tema principal fue el proyecto impulsado por el bloque Pro, que manifiesta el apoyo al opositor detenido.
Los diputados porteños aprobaron con 33 votos a favor, 16 en contra y una abstención el proyecto de Declaración que expresa la “profunda preocupación por la detención del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma”, contemplado en el expediente 121-D-15 e impulsado por el bloque Pro. El interbloque kirchnerista votó en contra de la propuesta.
El legislador Pablo Bergel (Bien Común), quien propuso el discurso sobre el proyecto, habló de un “intento de desestabilización que vive Venezuela” y ofreció su solidaridad con el país. Asimismo manifestó su voto en contra.
Por su parte el diputado Marcelo Ramal (FIT) destacó la “gravísima crisis que recorre a Venezuela y su pueblo” pero sostuvo que “el régimen venezolano está siendo un grave agresor contra las conquistas de la revolución bolivariana”. Si bien Ramal repudió la injerencia norteamericana anunció su voto positivo y señaló que “una salida a la crisis sólo tendrá lugar si los trabajadores de Venezuela emprenden un rumbo independiente contra el imperialismo”.
El legislador Héctor Huici (Pro), autor del proyecto, resaltó que en Venezuela se produjo la “detención de opositores que no provienen precisamente de la derecha extrema” y agregó que durante el gobierno de Nicolás Maduro “hay más detenidos políticos que en el de Chávez”.
A su turno, la presidenta del bloque kirchenrista, Laura Alegre, manifestó su sorpresa ante “las coincidencias de un partido de izquierda y de derecha” en referencia a la decisión de ramal y el Pro. Alegre expresó que “eso habla de la gravedad en las construcciones políticas en Argentina”.
Respecto del proyecto, la diputada sostuvo que la detención de Ledezma “es un hecho que está amparado por el Poder Judicial de Venezuela” y agregó: “podemos opinar sobre situaciones internacionales que violan nuestra soberanía pero no sobre situaciones internas”.
Por su parte, José Cruz Campagnoli (Nuevo Encuentro) declaró que en Venezuela el gobierno está “hiper-legitimado en las urnas” y que “la derecha intenta un proceso de ruptura”. El legislador afirmó: “hay una derecha golpista en Venezuela, que fracasó en 2002 y 2003. Y también hay una derecha regional que no se banca las decisiones de los pueblos – mencionó la situación actual que atraviesan Brasil, Ecuador y también Argentina- y ahora apelan a Estados Unidos para que intervenga”.
El proyecto de declaración- de autoría de los diputados macristas Héctor Huici, y sus coautores Cecilia de la Torre e Iván Petrella- sostiene que “la intolerancia y la violencia política en Venezuela han llegado a límites absolutamente insostenibles e indefendibles” y agrega: “es de lamentar no sólo el silencio del gobierno argentino sino también la pasividad de la región, en tanto gobiernos y organismos como la UNASUR”.
“Las acciones antidemocráticas y antirepublicanas sobre las que se basa esta declaración no constituyen hechos aislados sino un estado de cosas en Venezuela que, sumado a la crisis económica y social, pone de manifiesto una creciente agresión a la que está expuesta la ciudadanía venezolana”, expresa el expediente.
Dentro de sus justificaciones el proyecto elaborado por Huici manifiesta que “es un imperativo moral continuar denunciando el constante avasallamiento de todas las libertades individuales y el hostigamiento hacia no sólo dirigentes políticos opositores sino la población en su conjunto”.
