En una sesión informativa sin sobresaltos ni cruces picantes, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, brindó su segundo informe de gestión en el Senado en una reunión que duró casi cinco horas y estuvo presidida por Federico Pinedo.

Las preguntas de la oposición giraron en torno al comunicado firmado con Londres por Malvinas, el aumento de tarifas y la situación energética del país, el desempleo, la realización de obras en provincias, y el Presupuesto 2017, entre otras.

Al comienzo, Peña dio un breve discurso, que duró menos de 20 minutos, y en el inicio destacó que desde el primero hasta este segundo informe se acordaron “leyes muy transcendentes” en el Congreso, que “van a ayudar mucho a consolidar el proceso de crecimiento del país”. En este sentido, agradeció al bloque de Cambiemos, pero en especial “a los bloques de la oposición”.

“El poder ver todo lo que se ha logrado es un gran incentivo para poder seguir adelante”, dijo y resaltó la aprobación de leyes como la reparación histórica para los jubilados, el blanqueo de capitales y la creación de las UVI’s, la ley propuesta por el radical Julio Cobos.

Sobre el panorama económico, el jefe de Gabinete afirmó: “hoy podemos decir que ya estamos en una inflación que esperamos en septiembre esté por tercera vez debajo del 1,5 por ciento”.

“Estamos camino a la baja gradual de la inflación”, resaltó y abogó por un 2017 “en crecimiento”. Además, expresó que “se va recuperando y fortaleciendo el salario real mes a mes”. En tanto, precisó que “hoy tenemos una paritaria del 32 por ciento”.

También remarcó el “avance” que se ha dado “en materia de ganancias y la devolución del IVA”. “Somos conscientes que falta, pero creemos que ya la tendencia está empezando a cambiar, en lo que tiene que ver con la actividad económica”, sostuvo.

Y siguió: “una Argentina que vuelve a estar en crecimiento y con inflación baja, va a ayudar para generar empleo”, al tiempo que reconoció la baja de 100 mil empleos en los últimos meses.

Peña reiteró los ejes del segundo semestre del Gobierno nacional, en materia económica: baja de inflación, aumento de obra pública y crecimiento de la actividad. “Estamos convencidos que vamos a ir saliendo de la agenda de la crisis y la recesión de este año”, aseguró.

En cuanto al fomento del empleo y la producción en el país, el jefe de ministros contó que se está “trabajando y dialogando” en base a un plan productivo con gobernadores y sindicalistas para crear un “espacio intersectorial”.

Dijo que se trata de un acuerdo “de largo plazo, que no sólo que mire al 2017, sino también al 2020 y 2030”. Por otra parte, manifestó que hay un “desafío muy importante” con “la discusión presupuestaria” que ya se está llevando a cabo en Diputados y luego pasará al Senado.

El jefe de Gabinete aspiró a la conformación de un cuadro tarifario gradual que permita “salir de la crisis energética” y celebró la licitación de energías renovables, la cual consideró “le va a cambiar la cara del país”.

Sobre la polémica por la aplicación de aumentos en las tarifas de los servicios públicos, Peña expresó que “todo lo que ocurrió con las tarifas fue un aprendizaje y un entendimiento que nos permite tener un marco más gradual. Seguramente se podrían haber hecho cosas distintas, pero estamos en un marco donde se observa que las instituciones funcionan”, y valoró el papel de la Corte Suprema de Justicia.

Por otro lado, Peña enfatizó en que “la reforma política es otro tema que sería muy importante que pudiéramos avanzar este año”, porque de lo contrario va a ser “muy complicada, directamente imposible” su implementación para el año que viene.

En referencia al escenario internacional, el jefe de Gabinete habló del “desafío” que “va a tener la Argentina en 2018 de ocupar la presidencia del G-20 y ser sede” y pronosticó que será “una enorme oportunidad de transmitir nuestra visión sobre el mundo”. Por otra parte, sobre el tema refugiados, aseguró que “honra nuestra identidad y nuestra tradición como país receptor de personas que necesitan ayuda en momentos de necesidad”.

Al momento de las respuestas sobre la caída del empleo, Peña culpó a la recesión y confió en “la mejora de la actividad económica y la obra pública”. Por otro lado, en referencia a las tarifas de gas y luz dijo que “de ninguna manera el tema está terminado”. Reconoció que “hay un enorme desajuste” y pidió reducir el consumo de energía.

Otro tema al que Peña no pudo evadir fue a los cuestionamientos por la firma del comunicado con el Reino Unido, sobre Malvinas. El jefe Gabinete ratificó “la defensa de la soberanía y el reclamo de nuestro país” y sostuvo que el acuerdo sólo es “una hoja de ruta” para trazar un “camino de mayor diálogo”.

El funcionario estuvo acompañado por los secretarios de Coordinación de Políticas Públicas, Gustavo Lopetegui, de Coordinación Interministerial, Mario Quintana, de Relaciones Parlamentarias, Paula Bertol, y de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo.