Un día después de su reunión con el presidente Mauricio Macri, al que volvió a ponderar en público, la diputada Elisa Carrió volvió con todo y con mucho protagonismo. Lo hizo con su actividad en el Congreso, y también al caer la noche en el marco de una actividad que realizó en el Instituto Hannah Arendt.

En ese marco fue interrogada por la prensa y confirmó que “voy a dar la batalla política el año que viene en las urnas”. La legisladora señaló que “voy a seguir peleando por la República y el humanismo hasta el último día de mi vida”.

Según confió, tenía decidido irsae de la política, ya “muy cansada”, pero se convenció finalmente de que “debe “dar la pelea política hasta el día de mi muerte”. ¿Qué la convenció? Donald Trump y su triunfo en las elecciones norteamericanas, que consideró “una victoria del fascismo”.

Respecto de su reunión con Mauricio Macri el lunes en la residencia presidencial, destacó que “él acepta que nadie me puede domesticar”, y confesó que “es la primera vez que puedo tener ese trato con alguien”.

“Con Macri estamos unidos y somos sinceros”, confió.

La diputada de Cambiemos habló en el marco de un reconocimiento realizado al juez Leopoldo Schifrin, integrante de la sala II de la Cámara Federal de La Plata, y a quen definió como “uno de los maestros del derecho argentino”, al que “le debemos el fallo histórico sobre imprescriptibilidad de los delitos de corrupción”.

“La edad no es una garantía de la imparcialidad de los jueces -añadió-. Schifrin es el erudito más grande de nuestro país”.

Por otra parte Carrió celebró la renuncia presentada este martes de María del Carmen Falbo como procuradora de la Suprema Corte de Justicia bonaerense. A tal punto que consideró que su salida “es, quizá, el cambio más importante en lo que va del año”.

Asimismo insistió en que su rol es “defender la Constitución y lo voy a cumplir, tenga o no cargos”.