En la sesión ordinaria de este jueves, los legisladores porteños aprobaron con 33 voluntades positivas y 21 en contra la normativa que ampliar el alcance del estacionamiento medido de 4.000 a 10.000 cuadras, un número más que significativo teniendo en cuenta que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires tiene un total de 24.000, lo que significaría que un 45% del territorio estaría bajo esta forma de aparcar.

“El Sistema de Estacionamiento Regulado tendrá una cobertura territorial que comprenda a la totalidad de la ciudad, dividiendo la misma en 5 zonas”, sostiene el proyecto votado por los diputados, y, además amplía las plazas por las cuales se deberá pagar para dejar el auto, con lo cual se incrementarán también la cantidad de barrios a los que llegará el sistema de estacionamiento medido.

Una de las perspectivas más innovadoras de la norma es que se dejarán de utilizar parquímetros y “se admitirá el pago mediante el empleo de terminales de pago autónomas instaladas en la vía pública y mediante aplicaciones instaladas en teléfonos celulares y/o dispositivos móviles o a través de Internet”. En este mismo sentido el texto arroja que “en cada zona deberán existir los mismos medios de pago, pudiendo incluir entre ellos a las tarjetas de crédito, débito y tarjetas sin contacto” y agrega que “el sistema deberá admitir, como mínimo, el abono de fracciones horarias de 15 minutos”.

También establece varias tarifas: el costo de la que se aplicará en zonas comerciales, llamada progresiva, aumentará a medida que sumen las horas de estacionamiento, mientras que en los sectores de menor densidad de circulación de gente regirá la sencilla.

Además prevé que “el Poder Ejecutivo adoptará las medidas necesarias que garanticen la adecuada prestación del servicio público de control y regulación del estacionamiento, hasta tanto el nuevo esquema regulatorio aprobado por la presente ley se encuentre implementado, garantizando niveles de servicio adecuados, procurando minimizar los conflictos originados en el estacionamiento indebido en todo el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.

La diputada oficialista Cristina García señaló que “este tema se vino trabajando mucho en esta Casa y nuevamente lo traemos al recinto porque es imprescindible optimizar el uso del espacio público”, además aseguró que es una “política pública que viene a mejorar la Ciudad de Buenos Aires”.

“El gobierno de la Ciudad tendrá el control de las grúas”, afirmó García, además destacó que “las terminales multipropósitos remplazaran a los parquímetros, que resultaran más sustentables ya que no eliminaran tickets”.

Por su parte, la legisladora de Confianza Pública Graciela Ocaña afirmó que “no estamos de acuerdo con este proyecto” y agregó que “creemos que no va a resolver un tema que la Ciudad tiene que resolver, tal y como es el tema del tránsito”. En este mismo sentido denunció que “creemos que detrás de la división de la Ciudad en zonas está dirigido a empresas, esto hay que trabajarlo seriamente”.

Desde el bloque PS, el diputado Hernán Arce explico que “el estacionamiento regulado es una buena herramienta para ordenar el transito” y destacó el trabajo de la comisión de Tránsito y Transporte ya que “se mostraron abiertos a tomar las modificaciones propuestas, por eso hoy estamos hablando de una ley que es mejor” no obstante aseguró que “no son suficientes para ordenar el caos en las calles porteñas”.

Desde el FpV, la legisladora Paula Penacca subrayó que “desde el bloque vamos a votar negativo porque sentimos que pese a los debates, no se ha logrado generar una normativa que nos haga pensar que va a ser favorable para nuestra ciudad y sus vecinos”.