La diputada nacional Victoria Donda presentó un proyecto de ley para reformar completamente la actual ley de Ética Pública. “La reforma a la ley de Ética Pública vigente es un paso imprescindible para trasparentar el sistema político y herir de muerte a la corrupción que reina en los principales niveles de gobierno desde hace muchos años”, sostuvo.

La presidenta del bloque de Libres del Sur en la Cámara baja agregó, además, que “es un proyecto que durante toda la década pasada el kirchnerismo se negó a tratar y lo mismo ocurrió el primer año de gestión de Cambiemos. De haberse aprobado una reforma de estas características, los argentinos nos hubiéramos ahorrado mucho dinero que funcionarios y empresarios corruptos se llevaron a sus bolsillos”.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de Diputados sostuvo que, de haberse aprobada esta ley, “las declaraciones juradas de quienes administran recursos públicos deberían incluir el origen de los fondos con que adquirieron bienes muebles e inmuebles. Además, resolveríamos rápidamente conflictos de intereses entre la función pública y la actividad privada, ya que los funcionarios que presenten situaciones de dudosa compatibilidad deberían renunciar a la actividad privada presuntamente incompatible al momento de su designación”.

Por otro lado, Donda detalla que la ley compele al Estado a designar una persona idónea y neutral en la Oficina Anticorrupción. Los funcionarios que tengan un patrimonio superior a los quinientos mil dólares deberán crear un fideicomiso ciego que administre su dinero hasta que concluyan su mandato; y quizá lo más relevante, que, a diferencia de la ley de Ética Pública vigente, quienes no cumplieran con sus obligaciones de no incurrir en conflictos de interés serían penalizados por mal desempeño en el cumplimiento de sus deberes de funcionario, entre otras consideraciones.

Para terminar, la diputada, que fue acompañada en la iniciativa por los otros integrantes del bloque de Libres del Sur, Graciela Cousinet y Federico Masso, explicó que se presentó este proyecto “porque el presidente Macri se comprometió ante los argentinos a no reproducir las prácticas de quienes lo antecedieron en el manejo de los recursos del Estado nacional. Sin embargo, no pasó un año de gestión, que ya se vieron involucrados en todo tipo de maniobras de dudosa legitimidad, tanto sus funcionarios como su propia familia. Espero que nos pongamos a trabajar de modo urgente para que no se siga burlando la esperanza de honestidad y transparencia en el manejo de los recursos públicos que sigue reclamando la ciudadanía”.