Tras el cierre de listas, la evaluación que hacen en el gabinete económico es buena, por considerar que la oposición está enfrentada entre sí. Ya trabajan en una reforma del Estado a implementar con posterioridad al mes de octubre.
Tras el armado de las listas de los distintos candidatos y concretada la división del peronismo, dentro del equipo económico concluyeron que las perspectivas para las elecciones parlamentarias de octubre son “muy buenas para el oficialismo”.
“Hay que tener en cuenta algo trascendente que es la unidad de criterios para presentarse ante la sociedad. Eso es lo que tiene ahora Cambiemos, y fue lo que tuvo en su momento el kirchnerismo y que sin dudas le dio tanto rédito político. Pero ahora están enfrentados unos contra otros y eso genera dudas en algunos sectores del electorado que lo va a capitalizar Cambiemos”, puntualizó uno de los principales funcionarios del gabinete económico.
“Hay que fijarse como se están peleando enfrente. Sin dudas que todas esas idas y vueltas, peleas, desencuentros, que algunos están con unos, otros que van para otro lado, va a generar mucha desconfianza en un sector de la población que quizás aún estaba algo indecisa y eso lo va a capitalizar Cambiemos”, agregó el funcionario.
Con perspectivas de un buen resultado en octubre, dentro del Gobierno comenzaron, a su vez, a profundizar la evaluación de una reforma del Estado y se estima que la iniciativa se llevaría a cabo antes de las elecciones parlamentarias de octubre.
El objetivo de esta mayor rapidez para la reforma del Estado es reducir una parte de la gran burocracia que hay en la administración pública.
“Se van a fusionar algunos ministerios, pero esencialmente una gran cantidad de secretarías que tiene la administración pública, algunas incluso con funciones superpuestas”, enfatizó la misma fuente.
Otro funcionario, en este caso de la Casa Rosada, aseguró que “creemos que esta iniciativa será bien vista incluso por la gente, ya que constatará que se estamos tratando de implementar austeridad para orientar el gasto a las obras públicas, los planes de vivienda, la asistencia social y los jubilados”.
El tema lo están trabajando el jefe de Gabinete, Marcos Peña, con sus pares integrantes de esa cartera, Gabriel Lopetegui y Mario Quintana, y en algunos puntos específicos el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.
Sin dudas que la reducción en la cantidad de ministerios es una de las prioridades que ha fijado el presidente Mauricio Macri.
En ese sentido se habla de bajar de las actuales 23 carteras ministeriales a 15 o 16, pero con un trabajo profundo en cuanto a las estructuras internas.
Esto implica la fusión de algunas secretarías, subsecretarías y direcciones generales.
Es más, si bien en estas últimas horas se ha comentado que los funcionarios que son candidatos seguirían en principio en sus cargos, se ve también como factible que cuando las elecciones de octubre estén más cerca, los mismos renuncien y se aproveche ese momento para ir avanzando en la reestructuración de algunas áreas de la administración pública.
