“Es imprescindible declarar esta emergencia forestal”, expresó la autora de la iniciativa, Gabriela Estévez, y agregó “los avances de la frontera agropecuaria y los desarrollos inmobiliarios, muestran cómo priman sólo los criterios económicos”.
La diputada nacional del bloque FpV/PJ Gabriela Estévez presentó un proyecto que busca declarar la Emergencia Forestal por seis años en toda la provincia, y contempla la suspensión de todo tipo de desmonte forestal nativo.
La norma prevé asimismo que la Autoridad Nacional de Aplicación de la Ley 26.331 (Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos) más el Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA) determinen el fehaciente cumplimiento de los requisitos normativos según el artículo 2° (definición de los bosques nativos asociados a los ecosistemas forestales naturales); y el artículo 6° (obligación de las provincias de realizar y actualizar periódicamente el Ordenamiento de los Bosques Nativos).
También dispone que la Autoridad Nacional de Aplicación asista a la Provincia en todo lo concerniente al ordenamiento territorial, uso del suelo y aprovechamiento y manejo de bosques durante la vigencia de la emergencia forestal.
“Es imprescindible declarar esta emergencia en Córdoba, donde los avances de la frontera agropecuaria y los desarrollos inmobiliarios, sin una debida regulación, muestran cómo priman sólo criterios económicos relegando los aspectos sociales y ambientales”, sostuvo la legisladora cordobesa al respecto.
Remitiendo a la Constitución Nacional en su Artículo 41, que refiere a que todos gozamos del derecho a un ambiente sano, la legisladora remarcó la importancia de los bosques para la protección de las cuencas hídricas de captación. “Las inundaciones que padecemos de manera recurrente están asociadas a la pérdida del efecto esponja de nuestro territorio; con la pasividad del Estado, los intereses particulares avanzaron en las últimas décadas con los agronegocios en la zona más llana y los emprendimientos inmobiliarios en la zona serrana”, insistió Estévez.
El bosque nativo cordobés, con sus distintos grupos de formaciones vegetales, hasta hace poco más de 100 años ocupaba alrededor de 13.000.000 de hectáreas de las 16.500.000 que conforman el territorio cordobés (más del 70%); hoy no alcanza a cubrir 1.250.000 hectáreas (menos del 10%) y, de ellas, quizás apenas 400.000 hectáreas correspondan a bosques en condiciones similares a las originales.
“Cualquier prosperidad en los agronegocios o en el desarrollo inmobiliario jamás puede compensar el altísimo costo social y ambiental que acarrea este desprecio por la naturaleza expresado en una permanente deforestación, en la pérdida de nuestro monte nativo”, continuó la diputada nacional por Córdoba.
Finalmente, insistiendo sobre la gravedad del problema y criticando la manera cómo los temas ambientales son soslayados por las autoridades provinciales, Estévez expresó: “Nuestra provincia luce la tasa de desmonte más alta del país y este avance de la frontera productiva no puede esconder los efectos devastadores sobre el ambiente; ni qué hablar del desplazamiento de pobladores rurales, expulsados de sus tierras, de los espacios que ancestralmente ocupan; y hasta de la pérdida de vidas a consecuencia de inundaciones que numerosos estudios científicos sostienen que son consecuencia de la destrucción del bosque nativo”.
