La legisladora de Unidad Ciudadana Victoria Montenegro cuestionó duramente el cierre el desmantelamiento de dos de las Consejerías de Salud Sexual y Reproductiva, ubicadas en Plaza Houssay (Recoleta) y la otra en la Villa 20 de Lugano. Además, advirtió que “la principal consecuencia es que las niñas y adolescentes no pueden decidir sobre sus cuerpo”.

En dichas sedes, dependientes del programa “Chau Tabú”, trabajaban psicólogos y médicos que entregaban métodos anticonceptivos -pastillas e inyectables anticonceptivos, test de embarazo, pastillas de emergencia y preservativos- y asesoran en temas de violencia de género, aborto, diversidad sexual, placer, infecciones de transmisión sexual, VIH-Sida, además de articular con el servicio de salud público general.

Según informó el Gobierno de la Ciudad, en dichas Consejerías se registraron durante el 2017 más de seis mil consultas -de las cuales el 95% fueron de mujeres de 15 a 29 años- en las que se han entregado casi nueve mil insumos.

Al respecto Montenegro afirmó que “esto genera consecuencias, la principal es que las niñas y adolescentes no pueden decidir sobre sus cuerpos, es hacer que vivan la sexualidad como un tabú y muchas veces terminan abortando clandestinamente -lo que les deja consecuencias y que muchas veces terminan muriendo-“ y consideró que “sexualidad es natural y hay que vivirla de esa manera, por eso le tenemos que dar a los jóvenes las herramientas necesarias para cuidarse, protegerse y vivir sin tabú”.

Además consideró que “el Gobierno de la Ciudad hace todo al revés y va en contra de los derechos que tenemos las mujeres” y sentenció que “estamos hablando de una ciudad rica, no es que no se puede costear sino que se tomó la decisión política de cerrar las consejerías”