La Cámara de Senadores aprobó un proyecto de ley que propone crear una Red Provincial de Mercados Regionales de Alimentos de la Agricultura Familiar y la Economía Social.
El objetivo de la iniciativa parlamentaria es fortalecer la comercialización de productos regionales y así incentivar el consumo de alimentos sanos a precios justos.
“Desde Movimiento Arraigo proponemos fortalecer la producción local de alimentos y el agregado de valor en origen, reduciendo los costos de miles de kilómetros de transporte con la venta directa del productor al consumidor en un espacio planificado y diseñado”, aseguró el senador del FdT Francisco “Paco” Durañona, autor de la iniciativa, mientras enfatizó en que “el acceso a alimentos saludables a precios justos se traduce en soberanía alimentaria”.
Además, el ex intendente de San Antonio de Areco destacó el programa de Mercados Regionales, impulsado por Subsecretaría de Desarrollo Agrario y Calidad Agroalimentaria de la provincia,
Y en ese sentido, aclaró que esta medida viene “a profundizar esa iniciativa” convirtiéndolo en ley y así “potenciar al sector de la agricultura familiar y la economía social, generando empleo formal, al que muchas veces por el bajo volumen de producción no pueden acceder”.
En ese sentido el autor del proyecto aprobado y que ahora deberán considerar los diputados, agregó que “la provincia de Buenos Aires es la más habitada del país y la principal productora de alimentos a nivel nacional, sin embargo, son cientos los productos que recorren kilómetros para poder abastecer su comercio y miles de vecinos y vecinas que luego lo ven reflejado en el costo de los productos. Por eso es necesario impulsar medidas que favorezcan el abastecimiento regional”.
La iniciativa incorpora la venta mayorista en los Mercados Regionales de Alimentos de la Agricultura Familiar y la Economía Social destinada a los pequeños comercios para la venta de estos productos y la garantía de su comercialización a precios justos.
Además, prevé que las y los productores participantes tengan la exención del Impuesto Inmobiliario Rural y de Ingresos Brutos.
“De esta manera favorecemos y priorizamos el abastecimiento regional con productos sustentables y accesibles en valor y cercanía por sobre la consolidación del modelo productivo centralista, concentrador, exportador y extractivista que monopoliza la producción y comercialización de alimentos”, finalizó Durañona.
