Un novedoso sistema productivo fue presentado en la Cámara de Diputados sobre la base de la experiencia de la fábrica Siam en Avellaneda, que de un virtual quebranto en mayo del 2001 cuenta ahora con contratos que llegan a los 2 millones de pesos mensuales.
La iniciativa surgió de los empleados de la tradicional fábrica Siam-Di Tella, que formaron una cooperativa para sostener las fuentes laborales cuando la crisis amenazaba la continuidad de la empresa.
A la idea solidaria de los trabajadores se sumó la experiencia en sistemas productivos del ingeniero Luis Perego, quien se convirtió en director del proyecto "Complejo Productivo Siam".
Los empleados de Siam buscaron apoyo institucional con la diputada radical Graciela Gastañaga, quien en junio del 2001 consiguió que el proyecto fuera declarado de interés nacional.
Siam funciona actualmente en un predio de 10 hectáreas en la localidad de Avellaneda y agrupa unas 300 empresas medianas y pequeñas que emplean a 400 trabajadores, sobre 120 de la tradicional Siam-Di Tella.
