Alfonsín realizó una enfática defensa de su conducta política en los últimos meses y de la decisión de impulsar un acuerdo parlamentario para ungir a Eduardo Duhalde como presidente interino de la Nación, y respondió los cuestionamientos que surgieron desde el radicalismo por la cercanía con la administración justicialista. "Por distintos motivos se utilizó con oportunismo mi persona para tratar de erosionar las ideas por las que he luchado y me he jugado toda mi vida, en el más estricto cumplimiento a las decisiones de mi partido y con una conducta transparente que no admito se ponga en tela de juicio", señaló en la carta de renuncia.

La decisión de renunciar a su banca de senador de la Nación tiene como trasfondo la necesidad de buscar un lugar sin compromisos institucionales que le permita trabajar hacia adentro del partido, con la mirada puesta en evitar una fuga de votos de las filas radicales.

Voceros partidarios señalaron que la idea de Alfonsín había madurado hace por lo menos diez días y que su intención era anunciarla recién a fines de esta semana, poco antes de realizar un viaje a Europa, para participar de un encuentro de la Internacional Socialista.

Pero el ex presidente tiene el convencimiento de que el Gobierno de Eduardo Duhalde deberá anticipar las elecciones y que, por lo tanto, no queda margen para demorar un programa de "reconstrucción partidaria". Según la versión del alfonsinismo, la insistencia en sostener la alianza con el Gobierno parte del convencimiento de que cuanto más tiempo dure la gestión de Duhalde más chances tiene la UCR de convertirse en alternativa de poder.

En el plano interno, el ex presidente deslizó su molestia por el hecho de haberse convertido en el centro de las críticas: "parece que todo se lo facturan a Alfonsín", se quejaron los hombres cercanos al ex presidente.

Alfonsín difundió ayer el documento con su renuncia, desde su domicilio particular de la avenida Santa Fe, en esta Capital, donde recibió a varios dirigentes afines.

El propio ex presidente anunció que su intención es continuar en la actividad política desde el llano, ya que actualmente no posee cargos partidarios. "Creo que mi tarea política es más necesaria en la prédica y en el encuentro con hombres y mujeres con los que es necesario discutir, la búsqueda de la libertad y de la igualdad para construir una democracia moderna y participativa. No la voy a abandonar jamás y durará lo que mis fuerzas resistan", dijo Alfonsín.

Según se estima, la renuncia de Alfonsín sería tratada mañana en la sesión ordinaria del cuerpo, cuando juraría la frepasista Diana Conti, senadora suplente electa junto con el ex presidente radical en los comicios de octubre de 1999.