El gobernador de Buenos Aires, Felipe Solá, consideró que los diputados duhaldistas que eliminaron del Presupuesto provincial 2005 las facultades para reasignar partidas "afectaron la institucionalidad" y "ahora quieren un gobernador maniatado", al tiempo que adelantó que estudiará la posibilidad de vetar la ley.
"Los diputados duhaldistas afectaron la institucionalidad", sostuvo el gobernador en una rueda de prensa con la agencias de noticias realizada en el anexo del Banco Provincia, después de una reunión mantenida con el presidente Néstor Kirchner en la Casa de Gobierno. En ese sentido, dijo que el ex presidente Eduardo Duhalde "sabía que sus diputados iban a tomar esta decisión y los apoyó", y agregó: "no sé si mi relación con Duhalde está rota, el tiempo lo dirá".
Tras la aprobación con cambios sustanciales del Presupuesto bonaerense para 2005 en la Legislatura, Solá denunció también que Duhalde estaba al tanto y apoyó una movida que a su criterio "afecta la institucionalidad de la Provincia en nombre de una interna partidaria".
"Siento que hay un intento muy claro de maniatarme", remarcó el gobernador Solá.
Solá no ahorró palabras a la hora de referirse al duhaldismo, sobre el que dijo: "siento que hay un intento muy claro para conseguir que haya un gobernador totalmente domesticado a un grupo de diputados", a los que se refirió como miembros de la "diputadora".
Sostuvo, en la misma línea, que va a analizar en profundidad los cambios introducidos por la Legislatura al Presupuesto de 2005, y aseguró que recién después analizará si veta la norma.
De todos modos, el mandatario bonaerense dijo que los legisladores de su propio partido le "quitaron herramientas de gestión" que tuvo en estos años y de las cuales -según afirmó- "nunca" abusó.
Solá agregó: "Mientras yo peleo para buscar nuevos ingresos para la Provincia, los legisladores de mi propio partido trabajan denodadamente para ver cómo pueden hacer para que mi gobierno retroceda".
Por primera vez desde que estalló el conflicto con el duhaldismo, Solá no habló sólo de los "gendarmes" -como él llama a las principales espadas del ex presidente-, sino que avanzó sobre la propia figura del caudillo bonaerense.
"Los hechos no se condicen con la realidad. El habla de apoyo y de institucionalidad, pero en los hechos sus legisladores me obstruyen", remarcó Solá, quien además sostuvo que en las últimas horas no mantuvo ninguna conversación con Duhalde.
