El proyecto que establece la figura de donante presunto será debatido finalmente el próximo miércoles en la Cámara de Diputados, en el marco de una sesión que abrirá una fuerte polémica en torno a la conveniencia de convertir a todos los ciudadanos en donantes de órganos, con excepción de aquellos que manifiesten su voluntad contraria.
La iniciativa, impulsada por el Ministerio de Salud, divide aguas al interior de los bloques con representación parlamentaria y obligó a los titulares de varias bancadas a disponer la libertad de acción de sus miembros a la hora de votar la iniciativa en el recinto de la Cámara baja.
Esas diferencias quedarán expuestas el miércoles tras el cuarto intermedio dispuesto en la última sesión, luego de la exposición del miembro informante de la mayoría, Oscar González, quien defendió la iniciativa oficial.
El justicialismo, que había intentado varias veces debatir el proyecto oficial, el miércoles pasado pudo imponer su mayoría para iniciar el debate pero no logró mantener el quórum para continuar su tratamiento, por lo que debió pasar a un cuarto intermedio hasta la próxima sesión.
Los diputados del radicalismo y del PJ expondrán dos posturas diferentes en torno al proyecto, en una sesión que podría extenderse hasta la madrugada ya hay que unos treinta oradores anotados para exponer. La propuesta oficial es impulsada por el ministro de Salud, Ginés González García, quien estuvo presente el miércoles en el Congreso cuando los diputados abrieron el debate.
La iniciativa propone reformas a la ley de Transplante -sancionada hace diez años- y generó un fuerte debate en la Cámara baja en los últimos tres años, durante su tratamiento en comisión.