Absolvieron a doce de los acusados por los incidentes de 2004.
El Tribunal Oral Criminal 17 absolvió a 12 de los 14 imputados por los incidentes ocurridos en 2004 en la Legislatura a raíz de una protesta. Sólo dos de los acusados recibieron un año de prisión.
Sin embargo, la mayoría de los acusados pasaron más de un año en la cárcel, por lo que evalúan enjuiciar al Estado.
El Tribunal Oral en lo Criminal 17 impuso a Carlos Scaramella la pena de un año y diez meses de prisión por “daño agravado” y le unificó el tiempo a pasar encarcelado en dos años y 6 meses debido a una condena anterior impuesta en el partido bonaerense de Quilmes. Sin embargo, los jueces Elsa Aurora Moral, Silvia Aráuz y Germán Nocetti Achaval ordenaron calcular el tiempo que Scaramella, único no excarcelado en la causa, lleva preso para determinar si corresponde liberarlo.
El otro condenado fue César Gerez, a quien se le impuso un año de prisión condicional por daño calificado, en tanto que los restantes doce acusados fueron absueltos en el veredicto leído por la tarde.
Los jueces absolvieron a Margarita Meira, Carlos Santamaría, Luis Eduardo Ruiz, Jorge Nieva, Eduardo Suriano, Pablo Armitrano, Maria del Carmen Infran Ferreyra, Héctor Gómez, Marcela Sanagua, Aníbal Fortuny Calderón, Adolfo Sánchez y Antonio Medina.
El fiscal de juicio Juan José Ghirimoldi había pedido una pena de tres años de prisión para todos los acusados por el delito de daño agravado, aunque descartó cargos como privación ilegal de la libertad y coacción, por los que llegaron al proceso.
Los defensores reclamaron la absolución en todos los casos por considerar que se trató de una causa “política” y pidieron que se investigase a la juez de instrucción de la causa, Silvia Ramond y a la fiscalía, pretensión rechazada ayer por el Tribunal.
Todos los imputados pasaron 14 meses detenidos con prisión preventiva acusados de haber cometido distintos delitos el 17 de julio de 2004, en una protesta contra el Código de Convivencia urbano que iba a tratarse en la Legislatura porteña.
Los travestis, vendedores ambulantes y meretrices fueron apresados por la policía después de los incidentes donde se rompieron instalaciones y según la denuncia inicial se privó de su libertad a legisladores, algo que fue descartado por el fiscal de juicio.
Antes de conocerse el veredicto, la mitad de los acusados proclamó su inocencia al hacer uso de sus “últimas palabras” ante el tribunal.
El ahora absuelto Jorge Nievas -travesti- denunció “maltrato policial” y dijo a los jueces que el crimen cometido fue “tenerlos 14 meses presos”.
Por su parte, Carmen Insfran dijo haber sufrido “golpes y humillaciones” y aclaró que el día de los incidentes no fue al lugar “con la intención de dañar a nadie”, sino que como prostituta se oponía “a modificaciones en la ley para evitar que nos persiguieran”.
“El fallo es bueno, pero le aseguro que es muy difícil estar contenta después de haber pasado 14 meses presa sin haber hecho nada malo”, explicó a los medios Margarita Meira, una vendedora ambulante de 57 años.
Meira y muchos de los otros acusados estuvieron presos luego del fallo en primera instancia, donde los procesaron por “coacción agravada” y de “privación ilegal de la libertad”. Incluso algunos de los detenidos denunciaron “golpes y humillaciones” durante el período carcelario.
Los incidentes ocurrieron el 16 de julio de 2004, cuando la Legislatura porteña discutía la reforma al por entonces llamado “Código de Convivencia”, y planeaba el endurecimiento de sanciones para vendedores ambulantes, prostitutas y piqueteros.
