El candidato a gobernador Francisco de Narváez se mostró partidario de votar en el futuro a una mujer, pero relativizó la capacidad de Cristina Fernández de Kirchner como eventual presidenta. Además, citando los sucesos de Santa Cruz, advirtió que “de Misiones a Santa Cruz, el país se ha cruzado con una línea” que le dice al presidente Kirchner: “paremos acá”.
“Creo que la señora del Presidente es una excelente legisladora y ojalá lo siga siendo, pero el principal cargo ejecutivo del país debe ser desarrollado por un hombre o una mujer que haya tenido experiencia ejecutiva”, diagnosticó el diputado nacional Francisco de Narváez.
Para justificar su aseveración, el legislador del Justicialismo Nacional sostuvo que “vamos hacia un país más complejo, con inflación, con inseguridad, crispado, en donde hay que hacer una cantidad de ajustes que se han venido postergando”, y si bien destacó que “hay que continuar con las cosas que están bien, aquellas cosas que hay que comenzar van a requerir muchos ‘no’, mucha firmeza, mucho carácter y al mismo tiempo la capacidad y vocación de dialogar, algo que no se nota por lo menos hasta ahora en el carácter de la señora del Presidente”.
En diálogo con el programa Una buena idea, de Radio Del Plata, De Narváez ratificó su candidatura a gobernador, pero dejó abierta la posibilidad de ir solo en la lista, sin acompañar a ningún candidato presidencial.
“Estamos pensando seriamente en la posibilidad de generar un frente por y para la provincia de Buenos Aires”, dijo al respecto, resaltando que “los porteños pueden elegir su jefe de Gobierno desvinculado de la decisión que después todos los argentinos tomaremos de quién será nuestro presidente o presidenta; lo mismo pasa con los cordobeses, con los santafesinos; ¿por qué la provincia de Buenos Aires no puede, una vez aunque sea, el mismo día, simultáneamente, dar el debate de quién puede ser su gobernador o gobernadora”, independientemente de las presidenciales.
Al respecto dijo que por el momento “no hay nadie que nos represente en el ámbito nacional y que contenga nuestro proyecto para la provincia de Buenos Aires, y creo que el proyecto del oficialismo es mantener a la provincia de Buenos Aires como una provincia cautiva, rehén, y esa es la mayor dificultad que le veo al candidato oficial, Daniel Scioli, a quien respeto por ser un político que siempre busca el diálogo y no la descalificación, pero demostrar que no va a ser la continuidad del fracaso de la gestión de Solá, y además que no va a ser rehén del Presidente, va a ser algo difícil de creer”.
Respecto al caso Skanska De Narváez remarcó que debe ser investigado por la justicia, pero como diputado nacional celebró “que haya dos diputados, uno del ARI y otro de Recrear, Bullrich y Pérez, que están haciendo también una gestión muy importante y se presentaron ante la Justicia”.
“Creo que la Justicia está actuando con suma certeza y seriedad y no creo que haya que vapulear el caso anticipando decisiones. Si hay ministros, si hay privados, quien fuere involucrado en casos de corrupción, la Justicia lo tiene que dictaminar. No hay que tomarlo a la ligera”, dijo, y dejó abierto su optimismo respecto a que “esto va a llegar a buen término”.
Consultado respecto a la situación planteada en la provincia de Santa Cruz, De Narváez señaló que “el Presidente esta probando su propia medicina. El feudo que ha sido Santa Cruz durante tanto tiempo llega un momento en que le perdió el miedo a la autoridad del gobernador y claramente, con sus más o menos justas razones, ha tomado la calle por un reclamo salarial”.
“Creo que lo que pasa en Santa Cruz es una sensación de hartazgo y de punto final a una sensación de dirigencia que me parece que a nivel nacional también comienza a sentir lo mismo –destacó-. Casi diría que de punta a punta: de Misiones a Santa Cruz, el país se ha cruzado con una línea que dice paremos acá”.
Para terminar, dio por sentado que en la Capital Federal los dos protagonistas del probable ballotage serán Mauricio Macri y Jorge Telerman, y admitió que le gustaría que gane el primero, por cuanto “se merece una oportunidad de gobernar la ciudad, pero creo que ambas opciones hablan también de una renovación de la política que tantos se reclama”, destacó.