Los legisladores porteños convertirían en ley sanciones más severas ya no contra los automovilistas que hablen por sus teléfonos móviles, sino por mandar mensajes mientras manejan.
La Legislatura de la ciudad trataría este jueves una norma que, en caso de ser aprobada, agravará las penas contra los automovilistas por el uso de teléfonos celulares.
El proyecto que será tratado apunta a aquellos conductores que puedan ser detectados escribiendo o mandando mensajes de texto mientras manejan, y las penas podrían ir de 200 a 2.000 pesos, según el tenor de la infracción.
La norma contempla agravantes, como cuando quien incurra en esas faltas sea conductor de un transporte público de pasajeros, taxi, remís o micro escolar. Ahí la pena será de entre 300 y 3.000 pesos.
Entre otros temas que podrían tratar los legisladores este jueves figuran el otorgamiento de un subsidio en caso de fallecimiento o incapacidad a bomberos voluntarios; la implementación de programas de créditos para personas con necesidades especiales que deban readecuar sus hogares; y la declaración al Palacio Legislativo Monumento Histórico, proyecto que pretende valorizar y proteger espacios y edificios públicos.
