Pasada la medianoche, tras 8 horas de sesión, la Cámara baja aprobó por 196 votos a favor y 9 en contra el desafuero del ex subcomisario. Desde los palcos aplaudieron la decisión de los legisladores. Hubo polémica por la abstención de los radicales.
La Cámara de Diputados de la Nación puso en manos de la Justicia el futuro de Luis Patti, ya que resultó un éxito la estrategia del oficialismo al aprobarse la quita de los fueros al ex intendente de Escobar.
El radicalismo pidió autorización para que algunos diputados de la bancada se abstuvieran, pero fue rechazado por la mayoría, objetando que había una situación de mayoría extraordinaria que indica más de dos tercios del Cuerpo.
“Es lamentable que no se autorice la abstención. Un hecho histórico”, sentenció un enfurecido Oscar Aguad.
La legisladora kirchnerista Graciela Camaño fue el miembro informante del oficialismo, como presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales.
“Quería dejar en claro estamos actuando conforme como lo establece la COnstitucion Nacional en el marco de una causa penal”, explicó Camaño. Y agregó: “Los legisladores estamos sometidos a las leyes igual que cualquier ciudadano y citó el artículo 70”.
Camaño realizó un extenso recorrido por la cuasa penal que involucra al ex subcomisario Luis Patti en delitos de lesa humanidad.
“La variación de las estrategias de la impunidad no pueden impedir que se continúe con el camino de la República. Por eso, el Parlamento es tutor de sus miembros y no se ampara en un fuero para ser inmune”, sentenció la diputada.
Por su parte, la diputada de la Coalición Cívica Marcela Rodríguez explicó que “el motivo de los fueros es para evitar que se fabrique una situación criminal o civil contra un legislador con motivos políticos”. Y sentenció: “Nadie se debe esconder detrás de los fueros”.
“Estamos ante una situación, según la solicitud del juez penal, donde la reestricción de la libertad ambulatoria puede perderla -agregó-. No se trata de una persecución penal”, sino “desaforarlo para que no se habilite ampararse en los fueros y escaparse de la Justicia”.
Rodríguez manifestó: “No vamos a dejar al juez atado de manos”. Porque “la Cámara no va a reemplazar al juez”.
“Si no desaforamos a Patti, el Estado argentino estaría en deuda con los Derechos Humanos”, concluyó la vicepresidenta tercera del Cuerpo.
“He escuchado decir que el cumplimiento de la Corte era imposible. Escuché decir que no podemos 258 bancas”, dijo a su turno el jefe de bancada de la Coalición Cívica Adrián Pérez, quien disparó: “El fallo de la Corte nos importa y mucho porque tenemos que respetar el dictamen del Poder Judicial. No compartimos el criterio de la Corte. Pero para que haya Justicia, Patti tiene que ser desaforado”.
“No se puede aplaudir cuando nos guste más o nos guste menos cuando un fallo no sea favorable”, concluyó Pérez. “Hay baches legales como la evaluación para los candidatos a ocupar una función pública”.
“Nosotros nunca compartimos una lista con Patti”, agregó en clara alusión al peronismo.
El titular del radicalismo, Oscar Aguad, acusó al ausente protagonista del debate de “torturar y matar a sus víctimas”, pero aclaró que “nosotros tenemos que respetar la Constitución Nacional”, por lo que “Patti debería haber asumido y luego desaforarlo”.
“La grave crisis permanente de la violación de las reglas de juego”, atacó el radical al Gobierno nacional. “La Corte nos ha dado una lección pero hay algunos que la quieren negar”.
“Debemos hacer un pacto del cumplimiento de las normas”, concluyó Aguad.
Desde el PRO, el diputado nacional Julián Obligio aclaró en sus primeras palabras que el bloque que representa a la centroderecha argentina tenía la intención de desaforar a Patti pero propuso que tuviera “una defensa en juicio público”.
“No debemos hacer lo mismo que él, debemos escucharlo”, sostuvo Obligio, quien parece que desconoce el proceso que se le ha llevado a Luis Patti en la Comisión de Peticiones y Reglamento. Al terminar sus palabras, afirmó que no acompañará al dictamen de mayoría y fue silbado por los participantes.
En cambio, el diputado Hugo Prieto de la Concertación adelantó que también apoyarían al kirchnerismo y explicó que “no es necesario incorporar a Patti para desaforarlo”.
“La composición de la Cámara está completa y aquí sí se afectaría la soberanía popular”, sentenció Prieto.
La diputada Vilma Ibarra destacó que “en reconocimiento a los votos de Patti, asumió el segundo de su lista, quien votó leyes sin condicionamiento alguno”.
“Creemos que tenemos la verdad y creemos que es un genocida”, aseveró Ibarra. “Nos tenemos que hacer cargo de los errores de la política pero no para ceder espacios a quienes no lo merecen”, expresó.
“Tenemos la obligación internacional de eliminar los obtáculos para que un violador de los delitos de lesa humanidad pueda ser juzgado”, sostuvo Ibarra, quien halagó a la Corte Suprema, pero se quejó porque “en esto se excedieron a sus facultades”.
El bloque socialista expresó que “tenemos que hacer todo lo posible para que este señor no esté ni un día más en libertad”.
El titular del ARI Autónomo, Eduardo Macaluse, aclaró que es “legitimo, legal y razonable todas las acciones tomadas por el Parlamento”. Y además, “los legisladores somos jueces de los miembros del Cuerpo”.
“Tenemos la obligación de venir a debatir en ese sentido contra la nulidad de los decretos de nulidad de los indultos dictados en los noventa para que se sepa la verdad y se juzga a los culpables”, sostuvo Macaluse.
“Adonde vayan, los iremos a buscar”, cantaron desde las gradas los militantes de H.I.J.O.S cuando el diputado Luis Lusquiños le cedió amablemente su tiempo a la diputada Victoria Donda Pérez, hija de desaparecidos.
“Va a brillar la Justicia contra la impunidad que tratan de imponernos desde la misma Policía que siguieron en la actualidad haciendo mal las cosas como los casos de gatillo fácil”, manifestó Donda, quien a leer una carta del joven querellante en la causa de Luis Patti, Manuel Goncálvez, terminó llorando pidiendo “Nunca Más”.
Lusquiños hizo una reflexión sobre porque en tres años se trató tres veces el tema Patti. “¿Estaremos haciendo algo mal?”, se preguntó el diputado de San Luis.
El legislador Claudio Lozano reclamó al oficialismo que “voten para desaforarlo pero no hagan alarde porque varios fueron compañeros de lista de Patti”.
Por su parte, la diputada Nora Ginzburg señaló que “Patti está juzgado de antemano y las actuaciones del juez federal de San Martín”. También se preguntó “porqué los testigos se presentaron luego de 20 años después”.
En la Cámara de Diputados, Ginzburg ejerció la defensa de Patti. Ante las palabras de la legisladora se escucharon silbidos. “Tengo serias dudas del proceso judicial contra Patti”, aseveró. “Hubo directivas en esta Cámara de legisladores para que el cuestionado no ingresara”, agregó.
La legisladora Adriana Tomaz, del PAUFE, precisamente el partido del ex intendente de Escobar, también hizo un detalle de los procesos judiciales “espurios y la interpretación de la norma de desafuero”.
“Hoy estaría la Cámara de Diputados quedando mal con la sociedad y debría tratar que la legalidad y la realidad vayan con el mismo camino”, dijo Tomaz.
El legislador Miguel Bonasso insertó un artículo periodístico y disparó contra la Corte Suprema porque “no nos ordena tomarle juramento a Patti. Yo no le tomaría juramento, porque el 23 de mayo de 2006 fue una decisión histórica”.
“Victoria Donda Pérez está sentada en el lugar de Patti cuando se sentó un rato el 5 de diciembre de 2005”, comentó como un detalle de color histórico que sorprendió a los presentes, el periodista oficialista.
El diputado mendocino demócrataprogresista Omar De Marchi atacó al peronismo al recordar que “fue el justicialismo quien sumó a la política a Luis Patti. El PJ debería pedir disculpas por sumar a Patti”. “Les dijo converso e hipócritas a muchos de sus colegas. Este es un abuso de la confianza popular”, concluyó.
La legisladora cordobeza Norma Morandini destacó que “por suerte no llegó tarde a los derechos humanos”. Asimismo, la periodista llamó al orden al presidente de la Cámara Eduardo Fellner, a quien acusó de “no prestarle atención”.
El radical Rubén Lanceta alteró la sesión a pedir que votaran el proyecto de minoría y alteró el clima acusando de no tener coraje de votar ese proyecto. “Me abstengo”, fue la palabra que disparó los silbidos del público y de los mismos diputados.
Como lo marca el reglamento, el cierre estuvo a cargo del jefe de bancada del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, quien detalló el proceso desde que Patti fue electo hasta que se aprobó el rechazo del diputado electo, el 23 de mayo de 2006. “Aquel día fue un día de fiesta” porque el Congreso “simboliza los mejores valores”.
“Lo que nos dice la Justicia, para los diputados que dicen que hay que aferrarse al dictamen de la Corte, les digo que lo único que nos piden es que desafore a Luis Patti”, argumentó Rossi. “El texto que proponemos es lo que la Justicia nos pide”. “Patti no viene del jardín de infantes; sino que nos solicitan que lo desaforemos para que vuelva a estar preso”, concluyó.
Rossi confesó que creía que la Corte iba a tomar un camino distinto y adelantó que van a tratar los proyectos de ley que reforme la ley Electoral para los requisitos de los candidatos.
“La decisión de la Corte fue un retroceso” y parafraseó a Serrat deseando que ese fuera un buen día.
