El diputado provincial José Luis Comparato (Coalición Cívica) presentó un proyecto de ley con el propósito de adherir a la Ley Nacional 25431, instituyendo el día 15 de octubre como “Día provincial de la Mujer Rural”.

En sus fundamentos, la iniciativa sostiene que “es innegable que el trabajo de la mujer es fundamental en el mundo de hoy, sin embargo, la mayoría de las veces se hace referencia a una mujer urbana y todo es muy diferente cuando se enfoca el tema desde el punto de vista de la mujer rural”.

“Con el objeto de apreciar el papel que cumple en la conservación, creación y producción de alimentos, y como sostenedora de su familia, fue que las Naciones Unidas fijaron el día 15 de octubre como el “Día Mundial de la Mujer Rural”.

“En idéntico sentido, en el año 2001 el Congreso de la Nación sanciona la Ley 25431, por medio de la cual se resuelve conmemorar, el mismo día, como “Día de la Mujer Rural” en la Argentina.

“La provincia de Buenos Aires cuenta con una importantísima cantidad de mujeres rurales que han desempeñado una substancial actividad en el desarrollo agropecuario, razón por la cual, la presente iniciativa esta totalmente justificada desde el momento en que, según las estadísticas de género de los últimos años, la mayoría de las personas pobres del mundo son mujeres y, dentro de esta estadística, las mujeres rurales son las que llevan la peor parte”.

“A medida que los hombres jóvenes y en buenas condiciones físicas parten hacia las ciudades a buscar trabajo, las mujeres quedan solas, encargadas de criar a sus hijos y administrar sus pequeñas posesiones: por ejemplo, en la actualidad, en algunas regiones de Africa, el 60 % de las familias esta a cargo de las mujeres. A pesar de esta situación de necesidad extrema, son siempre las últimas en acceder a los recursos, la capacitación y los préstamos financieros”.

Argentina posee importantes ejemplos de mujeres rurales que se han agrupado en los últimos años para defender sus derechos y su cultura. Por ejemplo, una Asociación que trabaja en la puna y los valles interandinos de Jujuy y Salta, formada por un grupo de unas 70 comunidades, tiene una idea muy clara de su función: crecer como organización para vivir del propio trabajo, acceder a salud y educación y recrear y adaptar su cultura para poder insertarse en el País actual.