El proyecto de ley en Diputados prevé que las personas con discapacidad comunicarán verbalmente, o por escrito o por lenguaje de señas al presidente de mesa, que una persona de su confianza mayor de edad y sin distinción de sexo, ingresará con ella al cuarto oscuro, no pudiendo aquel ni ninguna otra persona obstaculizar o dificultar el ejercicio del derecho a ser asistido.
El 28 de junio los argentinos mayores de 18 años están convocados a votar para elegir a los legisladores. Sin embargo, para los discapacitados no será tan fácil el trámite cívico, porque las estructuras no están adaptadas y el Código Electoral indica que el voto debe ser secreto por lo que no puede haber ningún acompañante que colabore con estas personas.
Ante esta problemática, los diputados oficialistas Guillermo Pereyra; el titular de la Comisión de Discapacidad, Claudio Morgado; Rubén Sciutto; y Gerónimo Vargas Aignasse impulsan un proyecto que pretende producir cambios que permitan a las personas con discapacidad una plena participación social, ejercer plenamente sus derechos cívicos, participar activamente en la rehabilitación e integración, tener la mayor autonomía posible, e igualdad de oportunidades.
“Las personas con discapacidad comunicaran verbalmente, o por escrito o por lenguaje de señas al presidente de la mesa, que una persona de su confianza mayor de edad y sin distinción de sexo, ingresara con ella al cuarto oscuro, no pudiendo aquel ni ninguna otra persona obstaculizar o dificultar el ejercicio del derecho a ser asistido”, dice el texto de la iniciativa, según destaca Parlamentario.com.
Este proyecto modifica, fundamentalmente, en materia electoral, la votación y sanciona conductas, contrarias a la libertad de voto en relación a las personas con discapacidad. La reforma, además de garantizar el ejercicio del derecho a sufragio, elimina obstáculos para que las personas con discapacidad puedan votar en forma autónoma, otorgando un trato mas digno y creando una herramienta efectiva que promueve su participación política y social.
De esta forma, según el proyecto, quienes tengan alguna discapacidad que les impida o dificulte el derecho al sufragio, estarán facultadas para decidir si necesitan ser asistidas en el acto de votar y podrán ser acompañadas hasta la mesa por alguien mayor de edad y de su confianza.
Cabe destacar que por la proximidad de las elecciones será imposible convertir este proyecto en ley, pero podrá ser discutido luego para el 2011.
