Todas las encuestas indican que el FpV ganará en la Tercera Sección electoral, mientras que están en dudas las otras secciones. El kirchnerismo pone todo lo que tiene.
Por Eleodoro Dof
La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires renueva la mitad de sus bancas 46, en las próximas elecciones generales del 28 de junio y todos los pronósticos indican que el oficialista FJpV se quedará con buena parte de las que están en juego pero que, no obstante, perderá espacio de poder en la futura conformación luego del 10 de diciembre.
Parlamentario ofrece un repaso de lo que constituyen estas elecciones en la Segunda, Tercera, Sexta y Octava Sección electoral, donde se elegirán los 46 diputados de los 92 que componen la Cámara baja provincial.
De los 46 diputados que se elegirán en las próximas elecciones, a la Segunda sección electoral, la región norte de la Provincia, le corresponde elegir 11, por la Tercera, el sur del conurbano bonaerense, 18. Los restantes 17 corresponden ser elegidos 11 por la Sexta (Sur de la provincia) y 6 en la Octava Sección electoral, la Capital bonaerense, la ciudad de La Plata.
Tercera
De la región, que comprende a la Tercera Sección electoral, diremos que es la más importante en cantidad de electores: representa, aproximadamente, el 34% de los electores total de la provincia.
En la última elección realizada votaron unos 2.300.000 positivamente, es decir el 77 % de los 3,5 millones de electores que figuran en el padrón. Aquella es la cifra que se tiene que dividir por 18, que es el número de diputados que deben ingresar a la Legislatura. En porcentaje -el piso- es de 5,55 por ciento de los votos positivos y en números son unos 127 mil votos.
El piso de 127 mil votos, sin discusión, alguna la superan el FJpV, al igual que Unión Pro y el ACyS. Resta saber si finalmente Nuevo Encuentro llegará a la cifra lo cual funcionará en los hechos contra los intereses del ganador de la elección.
En la sección electoral, la más importante de la provincia de Buenos Aires, los kirchneristas no dudan de alzarse con el triunfo e incluso los opositores reconocen en la previa dicha victoria. Los encuestadores otorgan diez puntos de ventaja que el Gobierno.
El ACyS y Unión PRO se dan codazo para ver quién logra mejor penetración en este complejo territorio político. Ambos aquí lograron el piso para senadores y, por lo tanto, arrancan con tres diputados “seguros” manteniendo el caudal electoral.
En la zona sur del conurbano bonaerense la elección está “nacionalizada” de por sí, más aún en las actuales condiciones, donde las ofertas electorales han convertido a la elección legislativa en una especie de “primaria presidencial”.
Néstor Kirchner y Daniel Scioli son los preferidos, luego aparece el dúo de opositores, sin entrar en detalles.
Francisco De Narváez es el candidato opositor que mejor mide y, por lo tanto, su zona gris de la boleta está entre el 5º y 6º lugar, mientras que el Acuerdo pretende no caerse del cuatro que por lógica le correspondería.
En la elección legislativa de 2005 los votos obtenidos por el FpV y el PJ -sumados- resultaron unos 1,5 millón y en 2007, en el rubro seccional logró 1,2 millón seguido por la CC con 360 mil, luego se ubicó Unión Pro con 270 mil y en cuarto lugar UNA con 177 mil.
Con estos antecedentes, todo hace suponer que será muy difícil que en esta votación el FJpV logre igual cantidad de votos, aunque todos hablan de que un millón de votos hay para el Frente del Gobierno en estos pagos. Lo cual hace suponer que al menos tres diputados estarán “sueltos”. Siempre que U-Pro pase los 850 mil votos y el ACyS los 510 mil y que Nuevo Encuentro no llegue a los 170. Si NE llega al piso, uno quedará “suelto”. Habrá que ver si U-Pro logra un crecimiento de más del triple y si el Acuerdo de la CC y la UCR permiten ese módico crecimiento que suponen 510 mil votos en la Tercera Sección electoral teniendo en cuenta la última elección. De lo que logren o no estás tres fuerzas dependerá la cosecha del FJpV que arranca con seis diputados seguros y que según nuestros pronósticos no podrían superar los 10 pero no inclinamos por nueve.
La boleta horizontal del oficialista FJpV, se verá reforzada por muchos candidatos testimoniales, muchos de ellos actuales intendentes en los distritos que componen la sección y con el actual vicegobernador Alberto Balestrini como cabeza de lista de diputados provinciales.
La segunda
En el norte de la provincia de Buenos Aires se despliega la Segunda Sección electoral que en las próximas elecciones tendrá que elegir 11 diputados en los quince distritos que la conforman.
Los 646 mil habitantes que residen en la región norte de la provincia de Buenos Aires representan el 4,68 por ciento del total de la Provincia, donde están habilitados para votar unos 500 mil electores.
Esta sección presenta como característica tener cuatro grandes ciudades que definen, en gran medida, la elección y representan el 60 por ciento del electorado. A saber: San Nicolás, con sus 100 mil electores, Pergamino y Zárate, con unos 75 mil cada uno, y San Pedro con unos 39 mil.
Además de estos cuatros distritos también forman parte de la sección otros once distritos que tienen entre 23 mil y 9 mil electores, ciudades de similares características que en orden decreciente sus padrones se achican por 1000 electores.
La elección de diputados presenta la característica que para entrar en la repartija de bancas hay que llegar al 9,09% de los votos positivos, algo que no perece estar muy lejos de las damas o caballeros que se candidatean en la región de las principales ofertas electorales.
Con los 320 mil votos positivos que habrá en la sección, el piso se ubicará en algo menos de 30 mil votos positivos, algo que los tres competidores no dudan en obtener.
Pero hasta dónde suben unos y bajan otros es lo que nadie sabe en el interior de la provincia de Buenos Aires donde las encuestas reflejan una gran brecha entre la parte nacional de la boleta y la regional y local.
El fenómeno de la elección, en términos de encuestas, es el crecimiento de la figura de Francisco De Narváez, quien mide bien en el interior de la provincia pero nadie sabe qué pasará con sus propuestas regionales y locales, donde el ACyS parecería mejor armado, con intendentes y referentes mejor identificados por los electores.
La línea de definición es la de 90 mil votos. Quien pase esa línea podrá lograr cuatro diputados por resto y quien no la pase deberá conformarse con tres.
Desde U-Pro consideran que están peleando la elección con el Acuerdo e idéntica sensación tiene en el Acuerdo; en el FJpV creen que pelean con U-Pro y ubican tercero al Acuerdo.
Lo último registrado en materia electoral asigna un 58,50% (unos 187 mil votos) al FpV, con 67 mil la CC, con 27 mil a UNA y con sólo 18 mil votos a U-Pro. Claro que pasó mucha agua bajo el puente y el hoy FJpV sufre la sangría de dos grandes vertientes que confluyeron en el FpV en las pasadas elecciones. Por un lado, el ex presidente de la Cámara de Diputados, Ismael Passaglia, encabeza la nomina de U-Pro, abriendo las puertas, en una región felipista, al denominado Properonismo. Por otro lado, el ConFe, que en rigor es quien pone en juego las dos bancas que se contabilizan para ACyS, que con un sistema de colectoras bien aceitado y puesto en prácticas en reiteradas oportunidades, ya no sumará para el Gobierno sino para el ACyS. A su favor el FJpV tiene la definición del gobierno socialista de Zárate que presentará colectora local en la sábana del frente del Gobierno.
Creer o reventar, pero hoy todos los testeos indican que U-Pro está en la disputa que se desarrolla en el orden del 30 % de los votos, con un armado regional y local que se revela demasiado endeble para sus adversarios políticos, luego de obtener en las pasadas elecciones un exacto 5,69% de los votos. Es por ello que en el ACyS se entusiasman y pronostican un 5/3/3 a favor de ellos, pero también habrá que verlo, la sección es muy peronistas dicen los del gobierno y los opositores.
Un párrafo aparte merece una disputa de fondo que tendrá su revancha en el cuadrilátero de San Nicolás. Allí Passaglia y José María Díaz Bancalari repetirán la competencia desarrollada en 2005, cuando el “Mono” jugó con el PJ y el doctor con el FpV. En aquella oportunidad Passaglia se impuso, hoy los números, por el momento, lo favorecen al actual diputado nacional de extracción metalúrgica.
Cuesta creer que FJpV pueda ser tercero en la sección pero eso es lo que están palpando los que llevan la campaña al hombro en la arena electoral, sin duda es el efecto soja que se cola en los humores de la gente en este lugar donde se encuentra el triángulo de oro de la provincia agroganadera.
Sexta
En esta sección electoral viven unos 700 mil habitantes, los que representa el 5,10% del total de habitantes que tiene la provincia de Buenos Aires. Algo menos de 400 mil votantes concurrirán a las mesas y unos 330 mil serán los que voten positivamente.
Se dice que en las elecciones legislativas el voto en blanco seccional no es tan alto como en los comicios donde se eligen intendente.
Por caso el voto blanco en el orden local ronda el 8 por ciento (similar al promedio provincial) pero en lo seccional trepa al 20% y, aunque suele bajar un poco cuando se elige gobernador, la cifra es más cercana a ésta última que a la primera.
En la región deberán repartirse 11 bancas de diputados, el cociente “repartidor” representa el 9,09% y rondará los 30 mil votos y, tal como están las cosas las tres ofertas electorales; FJpV, ACyS y U-Pro; se encuentran superando esta cifra sin problemas.
Bahía Blanca representa una porción importante de los votos que aquí están en disputa, los 210 mil electores habilitados constituyen casi el 40% del total de la sección. Pero Bahía es una gran incógnita hoy.
El intendente, que resistió ser testimonial en la lista de legisladores provinciales, aseguró que garantiza el 32% a la lista que encabeza el ex presidente de la República, Néstor Kirchner, y, aunque nada dijo, se supone que este es el piso de la boleta del FJpV, porque el que mide poco en la ciudad puerto del sur provincial es NK no los candidatos regionales ni locales.
Laderos del “candidato fenómeno” Francisco De Narváez muestran encuestas que lo dan 10 puntos arriba de Margarita Stolbizer, que es seguida de cerca por la lista del Gobierno. Pero nadie puede responder cómo puede ser que las pocas encuestas que se manejan sobre el rubro legislador provincial, el candidato del ACyS, Jaime Linares, tenga una ventaja de 15 puntos sobre los de otras boletas.
Así las cosas, el esquema objetivo sigue siendo el mismo que en la Segunda Sección: los candidatos corren por la línea de los 90 mil votos. El antecedente inmediato es la última elección en donde, a favor del FJpV, el movimiento vecinalista no jugó tan pegado. En 2007 el triunfo se lo llevó el FpV, en el rubro seccional, con 147 mil votos (45,32%), el segundo puesto fue para la CC con 82 mil votos (25,13%), el tercer puesto fue para el voto en blanco con 98 mil votos (23%), el cuarto lugar lo ocupó la UCR con 35 mil votos (11%) y el quinto lugar lo ocupó U-Pro con 25 mil votos (7,80).
Nuevamente aquí el cuadro que reflejan las mediciones es un crecimiento exponencial de U-Pro que en el terreno estrictamente político solo sumó a Felipe Solá que en la Sexta aporta mucha logística y algún que otro candidato.
La Capital
La Capital de la provincia de Buenos Aires, la ciudad de La Plata, alberga a unos 570 mil habitantes y representa el 4,14% del total de habitantes de la provincia. Constituye, además, el único distrito que conforma una sección electoral.
Como sucede en general en las grandes ciudades que existen en Buenos Aires, el ausentismo es mayor que en el interior de la provincia. El caso concreto de la ciudad de La Plata, en la última elección con un padrón de 459.229 electores, efectivamente concurrieron a votar 356.145, de los cuales 296.178 mil votaron positivamente. Por lo tanto, se calcula que el piso para entrar en el reparto de bancas para diputados provinciales es de unos aproximadamente algo menos de 50 votos positivos que constituyen el 16,66% del total.
El voto que el universo peronista-oficialista logró en el 2005 es considerable. Sumando los votos conseguidos, en aquella oportunidad por el FpV, PJ y el sello de Bruera, suman el 69,74% del total de los positivos. En 2007 el sello Kirchner no tiene una buena llegada por ello la centralidad de la campaña en la figura del intendente y apellido Bruera, ya que su hermano es el candidato a primer diputado provincial.
Pero el armado del FJpV implica de mínima la suma de los votos obtenidos por Pablo Bruera más los cosechados por Carlos Castagneto (su esposa es tercer candidata a diputada) y alguna parte considerable del alakismo. O sea, sin contar el arrastre que implicaría “la buena imagen de gestión”, en el rubro seccional el FJpV contaría con los votos obtenidos del Progreso Social (sello de Bruera) 46 mil votos, más los del Frente Grande (Castagneto) 22 y alguna fracción en disputa con U-Pro de lo obtenido por el PJ (Alak) 58; total de puros 68 con 58 en disputa. El Acuerdo estaría sumando lo de la CC y la UCR lo que representa unos 84 mil votos y U-Pro arranca con 33 mil más lo que seduzca de los 58 que logró Alak y votos que fueron a sellos menores en las pasadas elecciones hoy adentro de la Unión.
En un primer golpe de vista, las tres fuerzas pasan los 50 mil votos y ninguno los 100, por lo tanto la lógica es 2/2/2, teniendo en cuenta que U-Pro crecería en todo lados tres veces lo alcanzado en las pasadas elecciones, también aquí no encontraría problemas lograr el doble. Es más algunos ven una posible caída del Acuerdo porque está vez no lograría las preferencias del “voto útil” o de “castigo al gobierno” y su merma sería tal que no llegaría al piso; algo que en principio parece poco probable. En ese caso hablan de un 4/2 a favor del gobierno local, provincial y nacional.
