El ministro de Justicia y Seguridad, Guillermo Montenegro, defendió el nombramiento de Jorge “Fino”Palacios al frente de la Policía Metropolitana al brindar su informe a la Comisión de Seguridad de la Legislatura que preside la legisladora del FpV Silvia La Ruffa.
Con todos los integrantes de la mencionada comisión reunidos, pero además con la presencia de más de una docena de diputados, tanto del oficialismo como de la oposición, el informe del ministro de Seguridad, Guillermo Montenegro, se inició en la Legislatura porteña a las 16.45 y apenas duró aproximadamente 15 minutos en el que defendió enfáticamente la designación realizada por el jefe de Gobierno, Mauricio Macri.
En la reunión también participaron diversas organizaciones sociales que mediante “carteles improvisados” hicieron conocer su negativa a que Palacios ocupe el cargo de jefe de la flamante fuerza de seguridad porteña.
En su defensa, el funcionario explicó que la escucha telefónica entre el cuestionado funcionario policial y un reducidor de vehículos llamado Jorge Sagorsky, cuyo audio pudo escucharse en los medios los últimos días, “fue una escucha judicial que estaba en secreto en un Juzgado Federal, y por casualidad terminó en los medios justo en el momento que sucedió el secuestro y asesinato de Axel Blumberg”.
Montenegro consideró “bastante oscura” la manera como aparecieron esas escuchas, y acalaró que Palacios no quedó “en ningún momento” imputado en la causa de Axel Blumberg.
“Declaró como testigo por ser el Superintendente de Investigaciones de la Policía Federal”, puntualizó.
En un pasaje Montenegro dijo conocer a Palacios desde hace veinte años, desde que estaba en el juzgado de Morón, y remarcó que “Palacios tiene en su foja felicitaciones de jueces y cuando se retira en 2004 Mauricio Macri lo lleva a Bioca como gerente de Seguridad”.
Respecto a la participación de “Fino” Palacios en los hechos de diciembre de 2001, sostuvo que “está acreditado que el 19 de diciembre Palacios no se encontraba en el país sino en Ciudad del Este, con un avión de la Policía Federal”. El ministro dijo que ante esos acontecimientos el policía, que entonces era superintendente de Investigaciones, decidió suspender el viaje y vuelve a la Ciudad de Buenos Aires. Pero “no tenía capacidad operativa en el procedimiento”.
“De hecho, las personas que hoy se encuentran imputadas en esa investigación son el jefe de Policía, el secretario de Seguridad, el superintendente Metropolitano y el director de Operaciones”, dijo.
El ministro concluyó que “no hay ninguna resolución judicial que impida la designación de esta persona que tiene los créditos suficientes y es el mejor jefe de Policía que puede tener la Ciudad de Buenos Aires”.
