A 89 años de la primera transmisión radiofónica en Argentina, el Gobierno nacional anunció el envío al Congreso del proyecto de ley que reemplazará a la actual ley de Radiodifusión dictada por la última dictadura militar, y establecerá un nuevo Sistema de Comunicación Audiovisual basado en los valores de la democracia y los derechos humanos.
Justo un 27 de agosto de 1920 se produjo un hecho histórico: desde el Teatro Coliseo de Buenos Aires, Enrique Telémaco Susini, médico otorrinolaringólogo, músico y radioaficionado, anunciaba con su voz de barítono: “Señoras y señores: la sociedad Radio Argentina les presenta hoy el festival sacro de Ricardo Wagner, Parsifal, con la actuación del tenor Maestri, el barítono Aldo Rossi Morelli y la soprano argentina Sara César, todos con la orquesta del teatro Costanzi de Roma, dirigida por el maestro Félix von Weingarten”.
A pesar de tener la voz sensiblemente dañada por una faringo laringitis, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner eligió este día histórico para la radiofonía argentina para anunciar el envío del proyecto de ley para un nuevo sistema de radiodifusión, lo que generará un arduo debate en el Parlamento nacional.
En el acto de presentación que se transmitió por cadena nacional, Cristina dijo que “este año el Congreso va a debatir el proyecto de ley de Medios Audiovisuales que sustituye a la ley de la dictadura”.
“Este proyecto no es del Gobierno, es de todos, de los 118 periodistas detenidos y desaparecidos durante la dictadura”, manifestó la Presidenta, recibiendo ahí el primer aplauso.
Al describir el proyecto de ley, Cristina destacó que “durante 26 años ningún Poder Ejecutivo envió este proyecto y es curioso, a pesar de que esos gobiernos también tuvieron superpoderes que los usaron para privatizaciones y bajar sueldos”.
En este sentido, Cristina aseveró que “había un suprapoder, el cual significa que había otros poderes que tienen la suficiente fuerza para arrancar decisiones en cualquiera de los tres poderes mediante la presión”, lo que fue ovacionado por los presentes.
“La libertad de expresión no puede convertirse en libertad de extorsión. La libertad de prensa no puede ser confundida con la libertar de los propietarios de la prensa. El derecho a la información significa al derecho a toda de la información y no a una porción distorsionada o la manipulación de la otra parte”, disparó la Presidenta en una clara alusión al enfrentamiento que tiene el Gobierno con varios medios.
“Esta ley busca consagrar la pluralidad, que todos puedan ser escuchados aunque no nos guste”, consideró Cristina, quien sentenció ante la atenta mirada de los senadores y diputados oficialistas: “Esta ley va a poner a prueba a la democracia argentina”, y exhortó al Congreso estar a la altura de las circunstancias y “si nuestro Parlamento tiene la capacidad de legislar para los intereses del colectivo social”.
“Es una oportunidad histórica que tenemos los argentinos para demostrar al mundo la calidad institucional”, aseveró Cristina Fernández de Kirchner.
Sobre la repartición del esquema de medios, la Presidenta anunció que el proyecto prevé un establecer tres segmentes de la información, donde el campo de los medios audiovisuales de carácter comercial sólo tendrá un tercio del espectro, mientras que el sector público tendrá también un tercio y las instituciones no gubernamentales poseerán el resto “para difundir su propia voz”.
Con respecto a las nuevas tecnologías, Cristina afirmó que “sería ingenuo no advertir que esta norma es un salto de tecnología. Ahora vamos a acceder a mejores precios y la mejor tecnología”.
La presentación de un proyecto de ley de suma importancia se vio teñido del enfrentamiento entre un poderoso multimedio –Grupo Clarín- y el Gobierno. De esta situación se hicieron eco el arco opositor conformado por el PRO, la UCR, PS, Coalición Cívica y peronistas disidentes. En declaraciones previas, el senador radical Ernesto Sanz adelantó que el radicalismo “no apoyará la iniciativa del Poder Ejecutivo”.
En tanto, el titular del COMFER, Gabriel Mariotto, se anticipó a las presiones que ejercerán los grandes medios contra los legisladores y advirtió: “Cuando los legisladores reciban la presión, sepan que el pueblo estará detrás”.
Puntos polémicos del proyecto de ley (Nº 1139)
Revisión de licencias
El artículo 38 del proyecto original se establece que cada dos años se revisarán las licencias en poder de los adjudicatarios. Desde el oficialismo aseguran que así establecerán garantías claras de que no se producirá discrecionalidad en la distribución de las licencias y se preservará la pluralidad de los medios.
El rol de las cooperativas de servicios públicos como cableoperadores
En el artículo 25 de la iniciativa, se ampara a las cooperativas de servicios públicos que ofrecen sus servicios en las localidades apartadas de los centros urbanos y son las únicas con posibilidades de brincar servicios audiovisuales. Se establece que las personas de existencia ideal sin fines de lucro podrán dar esos servicios pero sólo si antes obtienen un dictamen de la Comisión de Defensa de la Competencia.
Triple Play
El artículo 25 también plantea que las compañías telefónicas podrán ingresar al negocio de la distribución de cable, permitiendo a las empresas ofrecer los servicios de internet, teléfono y televisión bajo un mismo soporte, dándole vida al denominado formato de triple play. Las firmas interesadas deberán reunir requisitos como interoperabilidad de redes, portabilidad numérica y demostrar que el 70% del capital es de origen argentino.
Debatan con profundidad
“Cuando los legisladores reciban la presión, sepan que tienen un pueblo atrás que lo esta sosteniendo”, dijo el titular del COMFER, Gabriel Mariotto, al anunciar el envío del proyecto de ley de Radiodifusión al Parlamento.
