La elección del Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires comenzó su cuenta regresiva luego de que se constituyera la Comisión Bicameral que se encarga elevar los candidatos a los cuerpos colegiados.
En Legislatura finalmente se conformó la Comisión Bicameral para la elección del Defensor del Pueblo, con algo más de un año de retraso ya que se estipulaba que 30 días después de la sanción de la ley 13.834 debía constituirse. La ley fue sancionada a mediados del 2008.
El 11 de diciembre de 2007, un día después del asumir como gobernador, Daniel Scioli instruyó a su entonces Jefe de Gabinete y Gobierno, Alberto Pérez, para anunciar que “el proyecto para la creación de la figura constitucional del Defensor del Pueblo será elevado a la Cámara de Diputados donde seguramente en días será aprobado”, anuncio que se realizó en una conferencia de prensa junto al propio Remo Carlotto, candidato primero de Scioli. Pérez aclaró que con la normativa se logrará “un avance en la institucionalidad de la Provincia que tiene que ver con la defensa de los ciudadanos en todos los aspectos” y adelantó que Remo era “quien creemos que es la persona mejor calificada para llevar esto adelante”.
Pero más allá de algunos retoques en “las competencias”, la figura constitucional del Defensor del Pueblo siempre fue solapadamente vista como una “amenaza” por muchos intendentes, principalmente del conurbano, que si bien no se oponen a la puesta en funcionamiento del organismo, sí pretenden que el funcionario “garantice cierta comprensión de las diversas realidades que existen en la provincia de Buenos Aires”.
El reclamo concreto era que el hombre o mujer que ocupe ese estratégico cargo sea alguien de “la política” y no una figura que cierre en la mercadotécnica que despliega el gobernador. Atentos a la “marcha atrás” que debía dar Scioli, legisladores e intendentes, expertos en el manejo de los tiempos, demoraron la cuestión hasta esta coyuntura, donde el oficialismo necesita abrir espacios de contención tanto para opositores como dentro de sus propias filas. Y apretaron el acelerador a fondo.
Así las cosas, con el caballo delante del carro, luego de una pequeña llovizna de nombre, el actual diputado del FpV/PJ Carlos Bonicato, que termina su mandato el próximo 10 de diciembre, es el semental del comisario para desempeñarse como titular de la Defensoría del Pueblo por el término de cinco años.
Procedimiento
Entonces, en cumplimiento a lo que indica el artículo segundo, inciso “A” de la Ley 13.834, desde la Cámara de Diputados, que preside Horacio González, se informó que se constituyó formalmente la Comisión Bicameral que pondrá en funcionamiento el proceso para elección del Defensor del Pueblo bonaerense.
El presidente será el diputado del FpV/PJ Luis Fernando Navarro; como vicepresidente se designó a la senadora también del FpV/PJ Marta Helguero; como secretaria fue nombrada la diputada radical Cecilia Moreau; y como vocales la integrarán Federico Scarabino (FpV/PJ), Osvaldo Goicoechea(FpV/PJ), Carlos Mosse (FpV/PJ), Viviana Arcidiácono (FpV/PJ), Luis Malagamba (GEN) y Jesús Porrúa (UCR), y sus pares de la Cámara baja Juan Garivoto (FpV/PJ), Horacio Delgado (FpV/PJ), Jorge Varela (FpV/PJ), Marcelo DI Pascuale (UP) y Ana María de Otazúa (GEN). En el mismo acto la Comisión Bicameral comenzó con la recepción de nombres, datos personales y antecedentes de los postulantes. Esta Comisión dictará su reglamento de funcionamiento y adoptará sus decisiones por simple mayoría de votos.
Cuenta regresiva
La constitución de la Comisión Bicameral comenzó a funcionar formalmente el 23 de noviembre y los 14 legisladores que la integran tendrán que elaborar una nómina con los candidatos a ocupar el cargo de Defensor del Pueblo. La nómina será publicada por un día en medios de comunicación provincial y en el Boletín Oficial.
En los cinco días subsiguientes, se podrán formular observaciones respecto de los candidatos propuestos. Las mismas deben presentarse por escrito y fundadas en circunstancias objetivas que puedan acreditarse por medios fehacientes. Los candidatos tendrán acceso a las mismas por el término de cinco días. Cumplido ese plazo, tendrán cinco días para contestarlas.
La Comisión Bicameral, vencidos los plazos establecidos en el párrafo anterior, deberá reunirse a efectos de considerar las observaciones y los descargos si los hubiere, y dentro de los 10 días subsiguientes deberá proponer a las Cámaras de uno a tres candidatos para ocupar el cargo.
Dentro de los treinta días, cada Cámara elegirá, por el voto de las dos terceras partes de sus miembros, a uno de los candidatos propuestos. Si en la primera votación ningún candidato obtiene la mayoría requerida debe repetirse la votación hasta alcanzarse la misma.
Los planes oficiales y sobre los que se anexan los acuerdos con opositores es restar acuerdo en recinto el próximo 3 de diciembre, en ambas Cámaras, con composición que finaliza mandato el 10 de diciembre, siempre y cuando no existieren “observaciones fundadas en circunstancias objetivas que puedan acreditarse por medios fehacientes”, respecto de algún candidato.