El ex presidente y diputado nacional participó de la reunión de la bancada oficialista que conduce Agustín Rossi. Algunos especulaban con que se despediría de sus colegas, en vísperas de ser consagrado secretario general de la Unasur, pero eso no sucedió.
Poco antes de las 11.30, el diputado nacional Néstor Kirchner llegó a las oficinas donde se reúne el bloque del Frente para la Victoria en pleno. Fue la primera vez que el ex mandatario participó de uno de esos cónclaves y muchos aventuraron que podría ser la última.
Según confiaron a Parlamentario.com fuentes legislativas consultadas, el ex mandatario arengó a los diputados con un discurso similar al dado el martes en la CGT. Palos a los medios, críticas a la oposición, reivindicación del modelo y del Gobierno de su esposa.
Con respecto al polémico proyecto de matrimonio entre personas del mismo sexo, ratificó la libertad de conciencia para la hora de votar.
Fue, definieron los voceros consultados, la exhortación de un jefe a su tropa. El diseño de las sillas evidenciaba la metodología comunicativa. No fue una mesa redonda. Quizás por un problema de espacio. Pero la realidad indica que en la mesa de reuniones estuvieron sentados al lado de Néstor Kirchner, Carlos Kunkel, Carlos “Cuto” Moreno, José María Díaz Bancalari, Patricia Fadel, Eduardo Fellner -presidente de la Cámara baja- y el jefe de bloque, Agustín Rossi. El resto estaba sentado en sillas dispuestas frente a los popes K, como si fuera un auditorio.
Debut y despedida, auguraron quienes especulan que con su consagración al frente de la Unasur, que podría confirmarse el martes que viene, Kirchner dejaría su banca. Empero, ese no es el espíritu que suele acompañar los movimientos pingüinos. Primero deberá esperar que se confirme lo que para muchos es un hecho, pero no hay que cocinar la presa antes de cazarla. El martes 4 se sabrá si es ungido titular del bloque regional, cargo vacante desde que el ecuatoriano Rodrigo Borja renunció.
La cuestión es que NK asistió a la reunión de bloque que esta vez contó con una previsible gran concurrencia de diputados oficialistas, y una generosa provisión de sándwiches de miga y gaseosas. También ingresaron después de Kirchner varios senadores, entre ellos el santacruceño Nicolás Fernández, el formoseño José Mayans y la sanjuanina Marina Riofrío.
Como se esperaba, el ex presidente les bajó línea para el futuro. Se quede o se vaya, él seguirá dictando las órdenes que la bancada oficialista deberá implementar, según la estrategia que determinen luego los popes del bloque.
La reunión concluyó poco antes de las 13, sin anuncios de ningún tipo por parte del ex presidente respecto a si seguirá ocupando su banca. Era obvio que sería así.
Al finalizar el encuentro, Rossi manifestó que “la reunión que tuvimos con la presencia del ex presidente y titular del PJ Néstor Kirchner fue muy rica porque Kirchner es nuestro referente político”. ¿Habrá sido tan rica como las medialunas y sandwich de miga que compartieron los legisladores?
El dato político fue la presencia de la diputada del Partido Renovador de Salta Mónica Torfe, quien si bien las últimas votaciones ha votado en línea con el oficialismo, fue la única aliada que participó en la reunión con Kirchner. ¿Rossi sumó una diputada fiel?
