El diputado nacional Eduardo Mauricio Ibarra impulsa la creación de un Banco Nacional de Desarrollo Económico y Productivo, que funcione como entidad autárquica dependiente del Poder Ejecutivo Nacional y se rija por las disposiciones de ésta ley, su carta orgánica y la ley de entidades financieras.

El banco, cuya sede central estará en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con filiales o representaciones en el país y en el exterior, tendrá por objeto obtener y canalizar los recursos necesarios para llevar a cabo los programas y proyectos que interesen al desarrollo nacional y regional. Con este fin debe, en particular, promover, participar y financiar mediante operaciones a corto, mediano y largo plazo:

El proyecto del diputado sanjuanino establece que las inversiones que se realicen en obras de infraestructura; la instalación y desarrollo de industrias de base; el proceso de reconversión y rehabilitación de empresas de capital nacional; la instalación, fomento, equipamiento y modernización de empresas industriales, energéticas, petroleras y mineras prioritariamente de capital nacional; y el desarrollo de actividades de investigación científica y técnica aplicada en los campos de la industria, sean de transformación o de extracción.

Entre otras actividades, el banco tendrá por objeto el otorgamiento de créditos a mediano y largo plazo, y complementariamente a corto plazo.

Ibarra tiene en cuenta en su iniciativa el apoyo y reciente aprobación que nuestro país ha dado para la creación del Banco del Sur, cuyos fines trascienden los límites de nuestro país y alcanzan a toda la región de Sudamérica, ante lo cual considera necesario contar con una institución financiera para afianzar el crecimiento productivo y económico de nuestro país, tal como hoy se refleja en Brasil con el Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico y Social (BNDES), una entidad gubernamental que tiene como objetivo financiar a largo plazo los emprendimientos que contribuyen al desarrollo de ese país.