Un grupo de diputados kirchneristas se reunieron en el Congreso con Aída Robles (Frente Guasú), la única diputada paraguaya que votó en contra de la destitución del expresidente Fernando Lugo.

Leonardo Grosso, Remo Carlotto, María Elena Chieno, Araceli Ferreyra, Marcos Cleri, y Liliana Ríos del Frente para la Victoria, junto a Martín Sabbatella y Carlos Raymundi de Nuevo Encuentro, manifestaron su acompañamiento al pueblo guaraní en la defensa de la democracia y le entregaron a la diputada Robles la declaración parlamentaria aprobada en junio que rechaza la “ruptura al orden democrático” en Paraguay. También le hicieron entrega de una fotografía con la imagen de Néstor Kirchner y Fernando Lugo.

Por su parte, Robles reconoció “la solidaridad y la hermandad del pueblo argentino” hacia los paraguayos desde el primer momento en que se inició el juicio político que depuso al expresidente.

La diputada ratificó que en Paraguay hubo un “golpe de Estado planificado” que tuvo como antecedente 23 juicios políticos contra Lugo que no habían podido trascender. En esta línea denunció una persecución política a periodistas y trabajadores estatales por parte del gobierno de Federico Franco y remarcó que el Parlamento guaraní “está compuesto por personajes con mucho poder político y económico” que “fueron los que produjeron el golpe”.

“Dejamos avanzar demasiado a las corporaciones, fuerzas que no podemos manejar y ese es el peligro”, advirtió Aída Robles, tras lamentar que la “actividad política se prostituyó demasiado”.

La legisladora “lugista” destacó que el bloqueo político impulsado por los países del Mercorsur hacia el gobierno “de facto” de Franco “se hace sentir en el Parlamento”, pero pronosticó que la situación “puede agravarse si no tenemos un debate serio”.

También participaron de la reunión militantes paraguayos del Frente Guasú residentes en Argentina, miembros del Partido Comunista, del Movimiento Evita, y de la CTA de La Matanza.