Tal cual lo habían anticipado desde la administración porteña, el jefe de Gobierno firmó el veto para la norma aprobada por la legislatura porteña.
Pese a la resistencia de la oposición, algunos de cuyos representantes habían iniciado una campaña en contra del veto, Mauricio Macri le dijo no a la ley que regulaba en la ciudad los abortos no punibles.
El argumento del jefe de Gobierno fue que la ley aprobada “contiene prescripciones que exceden los lineamientos establecidos por la Corte Suprema de Justicia de la Nación” en su fallo del 13 de marzo último.
El decreto, que todavía no fue publicado en el Boletín Oficial, lleva las firmas del jefe de Gobierno los ministros de Salud, Desarrollo Económico, Desarrollo Social y Justicia y Seguridad, como así también el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta.
El veto está fundamentado en que la ley aprobada en la Legislatura “tal como ha sido redactada contiene prescripciones que exceden los lineamientos establecidos por la Corte Suprema de Justicia de la Nación” en su fallo de marzo pasado acerca de un caso particular.
Se indica además que la norma vetada “desconoce la homogeneidad del sistema jurídico establecido por la Constitución Nacional y contrarían expresas disposiciones constitucionales y del derecho de fondo, en especial teniendo en cuenta que se mantiene la calificación penal”.
