El triunfo del Frente Renovador en las pasadas elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires y en buena parte de las secciones electorales bonaerenses tiene un impacto relativo Legislatura provincial en relación al reparto de bancas.

Sucede que, a partir de los resultados del domingo, el FpV-PJ contará con un bloque de 43 diputados contra los 37 que poseía, o sea, tendrá 6 integrantes más.

De las 46 bancas que se pusieron en juego para la Cámara baja, el FpV-PJ se quedó con 18 contra 16 del Frente Renovador. Además, el Frente Progresista Cívico y Social sumó 9; el Frente Unidos por la Libertad y el Trabajo 2; y el Frente de Izquierda se quedó con una banca.

Con estos resultados el oficialismo está cerca de garantizarse el quórum propio para sesionar, si se suman los votos de bloques aliados. El dato saliente de la elección es que, en la categoría diputados provinciales, la lista más votada en términos porcentuales fue la del FpV, y el único rubro en la que venció a la nómina de Sergio Massa.

Ante este panorama, en Diputados, en los primeros cabildeos que realizaron los principales dirigentes del oficialismo de diversos linajes se arribó a la conclusión que no hay que “hacer olas” de cara a la nueva conformación institucional.