Confesó por Twitter que se había olvidado de informarlo ante la Asamblea Legislativa, pero lo hizo entonces a través de esa vía.
La presidenta subsanó un olvido de su discurso presidencial a través de Twitter. No, no hablamos de la inauguración formal de las sesiones ordinarias, a las que hizo referencia al principio -“Venimos hoy a inaugurar, como manda la Constitución, el período ordinario de sesiones legislativas, exactamente, el 132°, y también, conforme establece el artículo 99, inciso 8, de la Constitución Nacional, a dar cuenta del estado de la Nación”, dijo-, mas no al cerrar su mensaje. En su extenso discurso omitió anunciar el envío al Congreso del proyecto de ley para tratar el Acuerdo entre el Estado argentino y Repsol por la expropiación de YPF. Y lo hizo horas después, ya camino a Río Gallegos, a través de su cuenta de Twitter.
Allí emitió una serie de tuits en los que contó que estaba viajando rumbo a Santa Cruz junto a su hijo y su nuera, leyendo los diarios, pues por la mañana no había tenido tiempo. Así fue que rescató de esa lectura una nota publicada en tiempo Argentino, donde se informaba que un juez contencioso administrativo avaló la decisión del Estado argentino sobre la expropiación de Aerolíneas Argentinas.
La serie de tuits incluyó fotos de su contacto con la militancia este sábado en la Plaza de los Dos Congresos, pero también otra de su perro Simón, para mostrar lo “grande” que está. Amén de ello, contó que había olvidado decir en su discurso “lo más importante”.
“Que ayer viernes mandé al Congreso el Proyecto Ley para tratar Acuerdo entre Estado Argentino y Repsol por expropiación. Indemnización, renuncia de juicios, etc. Mirá la diferencia. Cuando sacaron YPF del patrimonio de los argentinos. Al desnacionalizarla y venderla, lo decidieron en el Ministerio de Economía de entonces. Nosotros, que recuperamos para los argentinos la segunda reserva de gas shale del mundo y la cuarta de petróleo shale del mundo”.
“Vamos a someter el acuerdo al Parlamento. Sabés qué? Tengo una inmensa alegría y también algo de nostalgia. El estaría feliz”, añadió, acotando que “después de todo, hablé una hora menos que el año pasado”.
